Shirley Manson se encargó además de hacer sentir al público como uno muy especial, al parecer estaba pendiente de lo que sucedía hasta adelante y en una ocasión pidió un par de audífonos para proteger los oídos de un pequeño que lograba ver desde el escenario. En otro momento, rindió homenaje al día de muertos haciendo énfasis en los 7 años que se tomaron de descanso, donde ellos y seguramente muchos otros habían perdido seres queridos. Son este tipo de detalles los que complementan una excelente presentación, pocas bandas parecen estar tan al pendiente de su público, Manson ni siquiera intentó hablar español como muchos otros, y sin embargo conectó emocionalmente con su gente durante las dos horas de concierto.
El encoré constó de otros tres éxitos, “Push It”, “Stupid Girl” y “You Look so fine” que cerró la noche con una Shirley Manson detrás de una guitarra para la versión extendida de esta balada que ya es casi una leyenda en el catálogo de la banda. Garbage se despidió luego de una noche larga, conmovidos y agradecidos prometieron regresar pronto y el público con su aplauso y euforia, prometió irlos a ver de nuevo, por que sí, puede que los Garbage sean gloria pasada y su nuevo material parezca ser reciclado del anterior, pero su cariño por el público, su entrega y calidad en el escenario, mejoran con cada presentación y eso es algo que se agradece mucho en una banda y sobre todo, una banda de esta talla.