réis que yo estoy en mi Padre, y vosotros en mí, y yo en vosotros … Respondió Jesús y le dijo: El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le a- mará, y vendremos a él, y haremos morada con él”( Juan 14: 16-20,
23).
Otro error es presentar a Dios atribuyéndole el papel que es en realidad el de Sanatás, que significa acusador, haciendo a Dios ser el acusador de la humanidad, porque es impía y no se merece su amor, y mostrando a Dios como si deseara la condenación de los pecadores en lugar de su arrepentimiento. Pero la Escritura afirma que Dios desea que todos sean salvos y procedan al arrepentimiento( 2 Pedro 3:9).
Otro error es colocar un énfasis exclusivo en los pecadores siendo salvados del castigo o consecuencias del pecado, en lugar de ponerlo en el pecador siendo salvado del pecado y dada partifundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha delante de él, en amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad, para alabanza de la gloria de su gracia, con la cual nos hizo aceptos en el Amado, en quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia”( Efesios 1:3-7).
No hay más consistencia con toda la Palabra de Dios, más esperanza cumplida y más gozo que ver la Encarnación, la cruz y la resurrección como la entrega voluntaria de amor para que el Hijo de Dios se convirtiera en el nuevo Adán, la nueva cabeza de la humanidad, que vino a reconciliar al mundo con Dios en nombre del Padre y en el poder del Espíritu Santo, y no para condenar al mundo.
www. comuniondelagracia. es Verdad y Vida Marzo- Abril 2017 19