mo sus hijos y sus hijas: “Alabado sea
Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido en las regiones celestiales con toda bendición espiritual en Cristo. Dios nos escogió en él
antes de la creación del mundo, para
que seamos santos y sin mancha delante de él. En amor nos predestinó para ser adoptados como hijos suyos por
medio de Jesucristo, según el buen
propósito de su voluntad” (Efesios 1:3-5).
¿Estamos dispuestos a dar la bienvenida, recibir y gozar de aquello de lo
que ya somos beneficiarios en y a través de Jesucristo? Esa es la cuestión
que todo ser humano debe responder
antes o después.
todos los otros competidores para que
cada uno consiguiera una medalla de
oro? Eso, y mucho más, es lo que Jesús, nuestro único campeón, hizo por
todos los seres humanos.
El apóstol Pablo explica esto
así: “Sabemos que nuestra vieja naturaleza fue crucificada con él para que
nuestro cuerpo pecaminoso perdiera su
poder, de modo que ya no siguiéramos
siendo esclavos del pecado; porque el
que muere queda liberado del pecado”
(Romanos 6:6-7). Asumiendo en sí mismo toda nuestra naturaleza humana y
pecado, podríamos decir que Jesús nos
llevó a todos sobre sus espaldas mientras corrió la buena carrera en la cruz,
donde él cruzó la meta por nosotros, y
con todos nosotros.
Hace casi 2.000
años se celebraron los
Jesús corrió la
Juegos Olímpicos esAsí que, ¿cómo vencarrera espiritual cieron los seres humapirituales. Jesús sabía
que ninguno de noso- olímpica decisiva en
nos el aguijón de la muertros podríamos ganar
te que es el pecado? Inla carrera en contra del contra del pecado y
cluyéndonos a todos en
de la muerte por la muerte de Jesús y
pecado, que estábamos condenados a ser
así del penosotros. liberándonos
eternos perdedores
cado. Jesús nos ha llecontra el pecado y la muerte eterna que
vado ya a la meta. Él es el campeón de
trae con él. Jesús corrió la carrera espicampeones que comparte su victoria
ritual olímpica decisiva en contra del pecon toda su creación. El apóstol Juan
cado y de la muerte por nosotros. E hizo
recogió esta maravillosa realidad de esalgo increíble, impensable, algo que nota forma, en las propias palabras de
sotros nunca habríamos pensado. Para
nuestro Salvador Jesucristo: “Pero yo,
desactivar el aguijón de la muerte, que
cuando sea levantado de la tierra, atraees el pecado, Jesús nos incluyó en su
ré a todos a mí mismo” (Juan 12:32).
propia muerte y de esa forma nos liberó
¿Cómo vencimos en Jesucristo el
a todos de la condena del pecado.
poder del pecado, que es la ley? Por
¿Puedes concebir en tu mente que
medio de la muerte de Jesús fuimos lien los Juegos Olímpicos de Río de Jabertados del poder del pecado, “la ley”
neiro hubiera un atleta, récord mundial,
que Pablo menciona en 1 Corintios
15:56. Esto es lo que él escribió con
con tal amor y fuerza que estuviera disrespecto a ese poder y nosotros: “Herpuesto a cargar sobre sus espaldas a
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Verdad y Vida Julio – Septiembre 2016
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