UNA HERMENÉUTICA AL PENSAMIENTO DE NIETZSCHE Revista Virtual_C | Page 11

segundo lugar es: morir pronto. Nietzsche toma este punto, lo relaciona con el pesimismo y la exuberancia de los dioses olimpicos, para que este último sea posible, hace falta el primero: el pesimismo. Es como ver la visión extasiada de un mártir, torturado con sus súplicas. Nietzsche nos desvela que, la montaña mágica del olimpo de demuestra a nosotros y nos enseña sus raices. Hay una identificación tan estricta entre los dioses y griegos como Zeus, Apolo, es fácil olvidar que hubo un tiempo anterior a la cultura griega, existe una literatura que exaspera el dolor en ellos y el sufrimiento. Las mueras, eran las diosas del destino, atrapaban a los hombres desde su nacimiento, los buitres que se comían las entrañas de Prometeo por robarle el fuego a los dioses, la triste historia de Edipo, la trájica historia de Horestes que acaba asesinando a su madre, luego, los titanes que, como menciona Nietzsche, los griegos lucian los horrres de la vida para poder vivir en absoluto, tuvieron que poner delante de ellos la resplandeciente cultura apolínea que el mundo olímpico ocultaba de la vista la experiencia dionisiaca de la vida y el sinsentido de la vida. Nietzsche dice, que los dioses justificaban la vida humana al vivirla mejor ellos mismos, es lo que precisamente hacen los actores de cine o de telenovelas. Ir al cine o ver telenovelas es tapar con el dedo lo que es vivir la vida, es una manera de escapar de él para argumentarlo.