Esta técnica, que adaptamos de M. Cortina, es adecuada para el inicio de procesos formativos.
Para su desarrollo se necesitan varios metros de cuerdas largas. Transcurre en estas fases:
a) Fase de preparación del espacio. Se formarán tres círculos. Se dejarán ciertas aperturas que
puedan comunicar unos círculos con otros. A continuación, empezará la dinámica.
b) Fase de identificación: El profesor/a pedirá que en al primer círculo vayan los alumnos cuya
motivación por la asignatura está basada en la obtención de créditos u otros incentivos
exclusivamente extrínsecos. Al segundo círculo irán quienes orienten su motivación a la
preparación profesional. En el tercero se meterán otros cuyas motivaciones puedan tener
una razón personal o de otro tipo: estén aquí de rebote, provisionalmente, etc.
c) Fase de diálogo o coloquio sobre las motivaciones académicas: Los participantes pueden
dialogar y expresarse confiadamente sobre sus motivaciones, circunstancias, causas de
elección del círculo, etc.
Círculos de motivación
Si la técnica se desarrolla, se sugiere que se realice:
1) Sin despegarse de sentido del humor.
2) Desde la base de que los alumnos que han participado lo han hecho porque han confiado en
el grupo y en nosotros.
3) Comunicando a los alumnos que un valor importante para emprender un proceso formativo
es la sinceridad personal y con los demás.
4) Clarificando que las motivaciones puede cambiar, puede hacerse más complejas y cambiar.
6