TOM SOWYER Tom Sawyer - Mark Twain | Page 54

Tom Sawyer www.librosmaravillosos.com Mark Twain -Ponte el sombrero y di que vas a casa; cuando llegues a la esquina con las otras, te escabulles y das la vuelta por la calleja y vienes. Yo voy por el otro camino y haré lo mismo. Así, cada uno de ellos se fue con un grupo de escolares distinto. Pocos momentos después los dos se reunieron al final de la calleja, y cuando volvieron a la escuela se hallaron dueños y señores de ella. Se sentaron juntos, con la pizarra delante, y Tom dio a Becky el lápiz y le llevó la mano guiándosela, y así crearon otra casa sorprendente. Cuando empezó a debilitarse su interés en el arte, empezaron a charlar. -¿Te gustan las ratas? -preguntó Tom. -Las aborrezco. -Bien; también yo... cuando están vivas. Pero quiero decir las muertas, para hacerlas dar vueltas por encima de la cabeza con un piolín. -No; me gustan poco las ratas, de todos modos. Lo que a mí me gusta es masticar goma. -¡Ya lo creo! ¡Ojalá tuviera! -¿De veras? Yo tengo un poco. Te dejaré masticar un rato, pero tienes que devolvérmela. Así se convino, masticaron por turnos, balanceando las piernas desde el banco de puro gozosos. -¿Has visto alguna vez el circo? -dijo Tom. -Sí, y mi papá me va a llevar otra vez si soy buena. Yo lo he visto tres o cuatro veces..., una barbaridad de veces. La iglesia no vale nada comparada con el circo: en el circo siempre está pasando algo. Yo voy a ser clown cuando sea grande. -¿De verdad? ¡Qué bien! Me gustan tanto, todos llenos de pintura. Y ganan montones de dinero..., casi un dólar por día; me lo ha dicho Ben Rogers. Di, Becky, ¿has estado alguna vez comprometida? -¿Qué es eso? -Pues comprometida para casarse. -No. -¿Te gustaría? 54 Preparado por Patricio Barros