manos, pues son simplemente esclavos que no saben lo que
hacen".
31. “De modo que, mientras le golpeaban, él les repartía comida
y los bendecía en amor sin límites".
32. "En ciertas ciudades el hijo fue recibido con goce, de modo
que con gusto se hubiera quedado allí alegrando sus hogares,
pero no le era dado estacionarse, pues tenía que llevar re galos
a cada cual en los vastos dominios del rey".
33. Y Jesús agregó: "Mi Padre Dios es rey de toda la humanidad
y me ha enviado con todos los regalos de su amor sin par y de
su riqueza sin límites”.
34. "Por lo mismo, a todas las gentes de todas las tierras tengo
que llevarles estos regalos: esta agua y este pan de vida".
35. "Me voy. Pero nos encontraremos otra vez. Porque en mi
Patria hay sitio para todos. Yo prepararé lugar para vosotros".
36. Y Jesús levantó las manos en bendición silente. Y luego se
fue.
Capítulo 37
Le regalan a Jesús un camello. Se va a Lahore donde mora con
Ajainín a quien le enseña. La lección de los músicos andarines. Jesús
continúa su jornada.
1. Una caravana de comerciantes viajaba por el valle de
Kashmar al mismo tiempo que Jesús caminaba por ese camino,
Iban a Lahore, ciudad de Hand, territorio de los cinco ríos.
2. Los comerciantes habían oído al profeta hablar, habían visto
los grandes trabajos que hizo en Leh, y estaban felices de verle
una vez más.
3. Y cuando supieron que viajaba a Lahore y que después de
eso cruzaría a Sind, atravesaría Persia y avanzaría al lejano
oeste y que no tenía bestia en que viajar.
4. Espontáneamente le regalaron un camello bien aderezado y
equipado y Jesús continuó la marcha en compañía de la
caravana.
5. Y cuando llegó a Lahore, Ajainín y otros sacerdotes
bráhmicos le recibieron con deleite.
6. Ajainín fue el mismo sacerdote que bajó al sur, a Benares,
algunos meses antes y que visitó a Jesús en la noche y
escuchó sus palabras de verdad.
7. Y Jesús fue el huésped de Ajainín y le enseñó muchas cosas
y le reveló los secretos del arte curativo.