Test Drive | Page 138

EL MECANISMO DE LA HERENCIA 125 (cromosomas no sexuales) y los cromosomas sexuales. En muchas especies la combinación XX está asociada con las hembras, pero en investigaciones posteriores se demostró que en muchas aves el macho es el que tiene el par XX, mientras que la hembra es XY. Las enfermedades por no disyunción se estudiaron mediante el análisis de los cariotipos aberrantes en síndromes como el de Down, el de Klinefelter, el de Turner, etc. Asimismo, los citogeneticistas demostraron que los cromosomas pueden romperse en dos o más puntos y luego volver a unirse con el segmento intermedio invertido. En esos casos de Inversión, aunque cambia el orden lineal de los genes en el cromosoma, el contenido del material génico permanece inalterado. En unas cuantas inversiones se detectaron cambios en la expresión génica, lo cual condujo al descubrimiento de un efecto de posición. La acción de los genes es afectada por su posición dentro del cromosoma. Por otra parte, algunos tipos cromosómicos, raros en términos de su longitud o su forma, han sido relacionados con ciertas enfermedades genéticas. En algunas clases de leucemia se ha detectado un cromosoma de longitud aberrante al que se dio el nombre de cromosoma Filadelfia porque fue en ese lugar donde lo describieron. Dichos cromosomas pueden ser resultado de una transferencia de partes entre los cromosomas homólogos: fenómeno llamado traslocación y parecido al mecanismo de entrecruzamiento. Muchas de las alteraciones estructurales de los cromosomas se estudiaron originalmente en los cromosomas gigantes de las glándulas salivales de la larva de Drosophila. Dichos cromosomas son resultado de varias .aplicaciones cromosómicas sin divisiones celulares intermedias. 9.8 TRATAMIENTO DE LAS ENFERMEDADES GENÉTICAS La manipulación humana del genoma entraña graves peligros. Jamás podrá darse una respuesta inequívoca a la pregunta de quién tiene derecho a decidir cuáles genes deberán engendrarse y cuáles serán eliminados. Dicho de una manera más sutil, se ha visto que los alelos nocivos en un ambiente son benéficos en otro. Por consiguiente, las decisiones en cuanto a cuáles alelos deben eliminarse no son necesariamente fáciles. Y, sin embargo, es muy difícil poseer conocimientos acerca de los efectos genéticos y no utilizarlos para aliviar las enfermedades hereditarias. El método más sencillo se basa en el hecho de que los alelos no se expresan a menos que interactúen con el ambiente y sean afectados por las experiencias del individuo. El profesor I. Michael Lerner, quien trabaja en Berkeley, utiliza el término eutenia para referirse a medidas en las que el ser humano altera el ambiente de un modo general para desalentar en la población total la expresión de rasgos genéticos dañinos. A modo de ejemplo, es probable que la presión arterial alta (hipertensión) tenga bases genéticas, pero si en las escuelas se sustituyen ciertos tentempiés (p. ej., hojuelas de papa y frituras) por productos con poca sal (p. ej., frutas y ciertas verduras), se logrará posponer la expresión de la hipertensión hasta una edad más avanzada. Asimismo, la reducción de los factores de estrés (p. ej., reduciendo los niveles de ruido en los medios urbanos) disminuirían los riesgos asociados con las vulnerabilidades genéticas. Un segundo problema ambiental sería la eufenia, que consiste en una intervención con medios biológicos, en casos específicos, para superar problemas genéticos. Algunos lactantes nacen con la incapacidad de metabolizar el aminoácido fenilalanina. Esta condición, llamada fenilcetonuria (PCU) (también PKU, del inglés phenylketonuria), se debe a una sola mutación génica y puede superarse dándole al pequeño, durante la lactancia y el comienzo de la infancia, una dieta baja en fenilalanina. Ese tratamiento impide el retraso mental que antaño estuvo asociado con la enfermedad. Otro ejemplo de eufenia es la sustitución de órganos defectuosos mediante trasplantes. En cada uno de esos casos ocurre una intervención prescriptiva específica en la que no se altera el genotipo, sino que se proporcionan compensaciones. Mediante la asesoría genética se ofrece información a los futuros padres en cuanto a las probabilidades de que sus hijos padezcan ciertas enfermedades genéticas. En general, la preocupación se concentra en la posibilidad de que una pareja normal sea portadora de problemas como la enfermedad de Tay-Sachs (un trastorno mortal del metabolismo de los lípidos) o la anemia drepanocítica. Dado que estas enfermedades sólo ocurren en la condición homocigótica recesiva, la unión de dos portadores genera un 25% de probabilidades de que uno de los hijos presente el defecto. Con la amniocentesis, técnica que permite obtener células del feto para analizarlas en el laboratorio, es posible determinar si el feto tiene alguna de esas enfermedades. La eugenesia se refiere a programas sociales en los que se promueve la reproducción de ciertos individuos con caracteres "deseables" y se desalienta la reproducción de individuos con caracteres "indeseables". Entre otras medidas eugenéticas, cabe citar la oferta de recompensas monetarias a quienes son considerados "aptos" y, en el otro extremo, la esterilización y hasta el encarcelamiento de los calificados como indeseables. En tal situación, las oportunidades de cometer abusos son enormes. Es probable que el escenario con las mayores esperanzas todavía pertenezca al porvenir: el uso de la ingeniería genética para reparar genes dañados. Ya se están realizando investigaciones para introducir, en los