Caballo de Troya
J. J. Benítez
de España a Estados Unidos. Yo había acompañado a don Juan Carlos y a doña Sofía en otras
visitas de Estado y sabía que aquélla era una oportunidad que no podía dejar escapar. Entre
otras importantes razones, porque ese tipo de viajes resulta siempre muy asequible a la
modesta economía de los profesionales del periodismo.
Así fue como aquel 11 de octubre de 1981, y en compañía de una treintena de periodistas
españoles, un segundo reactor de la TWA -el vuelo 407- me situaba en el aeropuert