Teoría Diccionario Oxford De La Música A - K | Page 658

663 Gluck, Christoph Willibald
Strachey. Fue comisionada por Covent Garden para la coronación de la reina Isabel II, quien asistió a su primera representación el 8 de junio de 1953.
Gloria Patri( lat.,“ Gloria a Dios”). * Doxología menor, agregada como verso final de todos los salmos.
“ Gloria tibi Trinitas”, Missa. Misa a seis voces de Taverner que hace uso de la antífona Gloria tibi Trinitas como cantus firmus. glosa. 1. Término usado del siglo XVI al XVIII para designar un tipo de ornamentación que descompone la melodía en figuras rápidas.
2. Término del siglo XVI que designa una técnica para escribir variaciones, por lo común sobre un tema religioso. Cabezón lo usa en Obras de música( Madrid, 1578) para describir variaciones figurativas simples de tonos salmódicos armonizados. Las variaciones de este tipo suelen ser más simples y menos extensas que las * diferencias.
Gluck, Christoph Willibald Ritter von( n Erasbach, Palatinado Superior, 2 de julio de 1714; m Viena, 15 de noviembre de 1787). Compositor austriaco. Su padre trabajó para la nobleza de Bohemia, contacto que el precoz Gluck supo aprovechar para desarrollarse en las carreras de música y leyes en Praga, quizá bajo el patrocinio del príncipe Lobkowitz. Gluck aprendió a tocar violín y los instrumentos de teclado, pero más adelante se reveló como virtuoso de la armónica de cristal. También es probable que haya estudiado canto; Burney consigna que en 1772 Gluck cantaba“ con muy escasa potencia vocal”, pero con una expresividad que“ hacía olvidar pronto ese defecto”. Poco después de cumplir los 20 años de edad viajó a Viena y de ahí a Milán, donde probablemente fue discípulo de Sammartini. Sus primeras ocho óperas, cuya música se ha perdido casi en su totalidad, aparecieron en Milán y Venecia entre 1743 y 1744. Todas dentro del género de opere serie, seis de ellas tuvieron libreto de Pietro Metastasio; Gluck no incursionó en la opera buffa. En 1746 presentó con poco éxito en Londres dos nuevas óperas pero, como tiempo después relatara a Burney, logró mejorar su comprensión de la música gracias al contacto con Handel y al gusto por lo inglés. Es posible que sea apócrifo el disparatado comentario de Handel en el que afirmaba que Gluck no sabía más contrapunto que su cocinero. La música de Gluck fue impresa por primera vez por el editor londinense Walsh; incluía las“ arias predilectas” de La caduta de’ giganti, una ópera cuyo tema narra el entonces reciente levantamiento jacobita, así como una colección de trío sonatas que constituyen su única obra instrumental independiente.
Desde sus primeras óperas, Gluck adquirió el hábito de volver a usar sus mejores ideas. De inspiración menos fluida que sus contemporáneos italianos y más dependiente de una originalidad que impactara, se justificaba en la búsqueda de mejores contextos para sus más audaces piezas, como el aria de Sesto,“ Se mai senti spirarti” de La clemenza di Tito, que bajo el título“ O malheureuse Iphigénie” se convirtiera en el momento culminante de su última obra maestra, Iphigénie en Tauride. Puesto que la mayoría de las producciones operísticas italianas difícilmente duraba más de una temporada y la impresión de las partituras era poco común, seguramente muy pocas personas fueron capaces de descubrir este económico recurso compositivo. Sin embargo, años después fue puesto en evidencia al presentar sus óperas en París, donde las controversias sobre los posibles plagios musicales de Gluck fueron un ingrediente infaltable en los periódicos del momento.
A su regreso a Alemania, Gluck trabajó con la compañía itinerante de Pietro Mingotti en Dresde, Viena, Dinamarca y Praga. En 1747 produjo una ópera cortesana( Le nozze d’ Ercole e d’ Ebe) en Dresde, y después usó libretos de Metastasio para Viena( 1748, La Semiramide riconosciuta) y Praga( 1750, Ezio). En 1750 contrajo matrimonio y se instaló en Viena, donde a pesar del escepticismo de la emperatriz María Teresa y de la hostilidad por parte del poeta de la corte, Metastasio, quien opinaba que su música era extraña, logró establecerse en el centro de la vida teatral. De diversas partes recibió encargos de obras importantes; en 1752, La clemenza di Tito fue motivo de controversia en Nápoles por la audaz armonía de“ Se mai senti spirarti”. Compuso Antigono( 1756) para Roma. Escribió diversas obras para la familia imperial, que a menudo participaba en las representaciones, como en Le cinesi( 1754), con un libreto satírico de Metastasio. Asimismo, con L’ innocenza giustificata( 1755) Gluck participó en las maniobras del conde Durazzo, intendente del teatro, destinadas a minar la supremacía de Metastasio adaptando los textos de sus arias a un argumento distinto; en el aria trascendental del final de esta obra, Gluck demostró su destreza para lograr gran poder dramático mediante la música más simple.
Antes de la celebrada“ reforma” de la ópera italiana, el principal cometido de Durazzo fue la producción de ballets y opéra comique francesa, para lo cual Gluck