Tenns: El suicidio Uno | Page 13

COMO HABLAR CON TUS PADRES

Lo primero que debes saber es que de parte de ellos puedes haber recibido algunas regañinas de vez en cuando y quizá -si lo piensas con detenimiento- te las hayas merecido, pero jamás lo harán con la intención de dañarte, así que hablar con tus padres siempre debería ser la primera opción.

Si lo que deseas es aclarar dudas, miedos o consejos respecto a TODAS las temáticas de la vida búscalos a ellos antes de recurrir a uno de tus amigos, ¿por qué? Sencillo, los chicos de tu edad no han vivido y experimentado tanto como tus padres. Por lo tanto, aunque sus consejos pueden ser buenos, con seguridad les falta un poco de "ensayo y error" además de sabiduría. Por eso, si buscas

ayuda, guía o consuelo, los únicos

que de veras están preparados

para proporcionártelos son

tus padres.

COMO HABLAR CON TUS HIJOS

1. Cambia tu actitud

Me refiero a que no te muestres presto a dar lecciones con ceño fruncido cada vez que tu hijo abra la boca para decir algo. Eso es lo que lo está alejando de ti.

2. Relájate y escucha sin juzgar a tus hijos adolescentes

Incluso cuando hagan preguntas difíciles de responder o te cuenten algo que hubieras preferido no haber escuchado nunca.

3. Recuerda que fuiste adolescente

Seguro hiciste locuras, no obstante de ese tipo de situaciones se aprende a vivir. Esas mismas situaciones forjaron tu carácter y tu persona y te permitieron sacar enseñanzas para el futuro.

4. Pon a tus hijos primero que cualquier ocupación extra

Esa es una de las tantas razones por las cuales los muchachos no buscan a sus padres para hablar con ellos. Seguramente porque en algún momento buscaron tu apoyo y tú los alejaste con un práctico: "ahora no que estoy ocupado". Solo hazle saber que cualquiera que sea su necesidad, estarás ahí para ayudarle sin juzgarlo pero sí para ayudarle a corregir el camino.

Además de lo antes expuesto, considera el hecho de que garantizar una buena comunicación padre—hijo desde la más tierna infancia. Esto se logra hablando de manera clara y sencilla con los niños sobre las cosas más simples o serias de la vida humana, sin misterios, sin cambiar el nombre de las cosas o las partes del cuerpo.

Créeme, lo que NO le enseñas en casa, lo aprenderá fuera de ella.

¿Y AHORA COMO LE DIGO?