Spanish ACAMS Today (Septiembre-Noviembre 2016) Vol. 15 No. 4 | Page 65

SOLUCIONES PRÁCTICAS Identificar y registrar los datos de riesgos pertinentes Debe considerarse cuidadosamente la identi- ficación de los elementos que forman el perfil de riesgo del cliente. La información se recoge típicamente al inicio de la apertura de la cuenta y puede actualizarse a lo largo de la vida de la relación. Los elementos de datos varían en función del tipo de cliente, la base de clientes y la oferta de la institución finan- ciera, entre otros factores. Los indicadores de riesgo se manifiestan en cualquier etapa del ciclo de vida del cliente y durante todo el período de conflicto del interés económico. El esquema del perfil de riesgo debe diseñarse teniendo en cuenta las actualizaciones. Algu- nos valores, tales como el “tipo de negocio”, justifican la recopilación de información rela- cionada adicional para revelar exposiciones concebibles. La composición de un perfil de riesgo del cliente se puede formular en torno a lo siguiente: • Quién—La identidad y naturaleza del cliente; el tipo de cliente; la ocupación o tipo de negocio (actual y anterior)—posi- bles destinatarios de las transferencias; la industria servida • Dónde—Geografías de residencia y ciudadanía; destinos y orígenes de las transferencias; ubicaciones de las transac- ciones comerciales; regiones de posibles inversiones • Qué—Transacciones esperadas, servicios, productos, divisas; historia de la actividad (si son un cliente existente); los factores de riesgo de la industria/profesión del cliente • Por qué—Objeto de la