Sin cadenas que te mancillen Sin cadenas que te mancillen_TEASER | Page 15

Sin cadenas que te mancillen 15 lugar estuviese habitado por una desconocida raza de titanes. La brisa proveniente de la selva, impregnada por el dulce olor de las flores, comenzaba a llenar sus pulmones. Los viajeros la aspiraban con placer después de los días de navegación. En tierra la vida bullía por todos lados. Por la orilla, grupos de pequeñas aves marinas caminaban por encima de los gran- des caparazones de las tortugas. En el tronco de un gran árbol, medio enterrado en el agua, un cocodrilo abría un poco sus mandíbulas, como si estuviera cazando insectos y desdeñara fijarse en la embarcación. Podían oír el canto de los loros y las llamadas de los pequeños monos aulladores que quizás les da- ban la bienvenida desde lo más profundo de la selva. De pronto, una nube de ibis blancos salió de la espesura y voló sobre sus cabezas. También lo consideraron como una bienvenida. De repente un viajero mostró con su mano la desembocadura de un río. A diferencia de las transparentes aguas del resto de la bahía, las de allí habían adquirido un color amarronado debido a los sedimentos arrastrados. A la derecha de la desembocadura del río, y subiendo por la ladera de una colina, se distinguían hasta cien casas de pequeño tamaño y un solo piso que forma- ban la desordenada aldea. Los pasajeros permanecieron un rato contemplando el buen aspecto que ofrecían las viviendas a lo lejos: las tejas rojas que las cubrían ofrecían un bonito contraste tanto con las blancas paredes como con el verde de las huertas que se extendían enfrente de las mismas. Poco a poco vieron como la comunidad aparecía atravesada por arroyos que cana- lizaban hasta el mar las aguas provenientes de las abundantes lluvias y las zonas pantanosas de las partes altas de la población. En la orilla jugaban niños de piel oscura que corrían desnu- dos, al lado de cerdos peludos que se revolcaban en las aguas de los arroyos. También pudieron distinguir varias casetas de pescadores con sus barcas. Delante de una de ellas se distinguía