Rumor de límites. Memoria del desasosiego (hacia las Pinturas Negras) FINAL DE LAS PINTURAS NEGRAS-QUINTA DEL SORDO | Page 72

72 va a ser contemplado, necesita de pincelada amplia no perdida en el detalle, para que le vigor contagie la escena y le de una mayor vida. Pierde fuerza lo local para ganarla el conjunto, libera la mente y la mano para que el tra- zo no sea esclavo. Abandona al maestro Velázquez de Las Meninas para lanzarse a los desafíos que le muestra el Greco. En esa lucha aparecerá Goya como lanzador de mundos nuevos. Su recorrido aquí ya ha sido amplio y su paleta es más libre, más personal, con ecos más de cercanos a Tiépolo y Lucas Jordán, como antes señalábamos, pero con personalidad propia. Es un mural ya con gesto, con duende, que diría Lorca, un mural sin gracia pero en “estado de gracia”. Cartones para Tapices (1776-91).- Por influencia de sus cuñados es llamado por Mengs, que era el pin- tor referente en las cortes europeas, para trabajar realizando cartones que sirvan de modelo en la Real Fábrica de Tapices de Madrid. Para llegar al tapiz debería elaborarse un modelo previo en car- tón, que servía de base a los obradores de la Fábrica de Tapices. Para este fin algunos de los pintores secundarios elaboraban bocetos y luego cuadros definitivos una vez aprobados. Entre otros figuraban, además del propio Goya, Antonio González Velázquez o Ramón Bayeu, bajo la dirección de Francisco Bayeu y Mariano Salvador Maella, y en última instancia, por Anton Raphael Mengs, El Rococó de Tiépolo y el Neoclasicismo de Mengs