Rumor de límites. Memoria del desasosiego (hacia las Pinturas Negras) FINAL DE LAS PINTURAS NEGRAS-QUINTA DEL SORDO | Page 64

64 sas monarquías europeas, auspiciadas por la rusa, con objeto de frenar las consecuencias de la Revolución francesa), que acabaron por la fuerza con los tímidos intentos constitucionales y sus reformas, imponiendo un régimen de terror que duraría los diez años siguientes (la llamada Década Omino- sa) consolidando el Absolutismo y donde los fusilamientos alcanzaron entre otros al coronel Riego por su pronunciamiento liberal republicano de 1820, o el de Torrijos por el de 1831. Corría el año 1823, cuando el 24 de mayo, sesenta mil soldados y otros tantos mercenarios, entraron en Madrid para después continuar a Cá- diz a donde llegarían el 31 de agosto. El Duque de Angulema sería el encar- gado de mandar a las tropas antiliberales, del que Fernando VII decía:“Mi augusto y amado primo el duque de Angulema al frente de un ejército va- liente, vencedor en todos mis dominios, me ha sacado de la esclavitud en que gemía, restituyéndome á mis amados vasallos, fieles y constantes”. Venían de Francia para acabar con el Trienio Liberal y devolver el trono a Fernando VII que se hallaba retenido por los liberales en Cádiz. Para redondear los llamaron cien mil: “Cien mil franceses están dispuestos a marchar invocando el nombre de san Luis para conservar en el trono de España a un Borbón, preservar ese hermoso reino de su ruina y reconciliar- lo con Europa”, clamaba Luis XVIII de Francia. Goya estaba ya en la Quinta del Sordo y al menos una de las frac- ciones las tropas pasaron probablemente por el puente de Segovia a poco