ARTÍCULO
Fotografía: Coyote_mx_
Texto: Orlando Medina Soto
Como la mayoría de habitantes de esta ciudad, su servidor llegó procedente de otro lugar a perturbar la abrumadora paz de
Querétaro. En aquel entonces, el paisaje natural del bajío era algo nuevo para mí, y me recuerdo pegado al cristal del autobús
mientras observaba el paisaje verde salpicado de huizaches, mezquites y pirules. Conforme pasó el tiempo y fui conociendo
mejor la ciudad, descubrí que dentro de la mancha urbana podía encontrar distintos micro climas, desde el templado de la zona
sur y el municipio de Corregidora, hasta el semidesierto que predomina en la zona norte de la ciudad, además de zonas de
transición y de diferente altitud. El lugar que había elegido como hogar, parecía ser un estuche de monerías decorado con
biznagas, yucas y… ¿palmeras?
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