Revista Tamadaba - 21 Revista Tamadaba - 21 | Page 43

Y funcionó. ¡Y cómo funcionó! Decidí crear y llevar a la práctica varias obras teatrales divertidas sobre los gustos de niños-as a lo largo del curso escolar y dentro de nuestra bonita biblioteca, teniendo como público al resto de alumnado y profesorado del centro (¡que no son pocos!) en las que todos mis alumnos y alumnas participaron, además de un pequeño programa llamado “Radio Patio” en los recreos de los viernes (¡equipo de megafonía del centro en mano!) Mi “grupo” (como a mí me gusta llamarlo porque, aunque cada uno de ellos proviene de una tutoría, gracias a esta actividad se han convertido en una piña), como se imaginarán, no puede ser más heterogéneo: diferentes edades, siglas (TDAH, TEA, ECOPHE…), distintos gustos y niveles académicos y aún así, ahora todos son amistades, son “actores y actrices del cole” y “locutores-as de Radio Patio”. El resto del alumnado del cole les piden autógrafos y ellos- as se sienten emocionados y por las nubes. Y yo no puedo estar más contenta. El miedo (o timidez) inicial que sentían antes de realizar la primera puesta en escena fue totalmente borrado del mapa después de los aplausos y vítores de sus propios compañeros- as de sus aulas ordinarias tras su actuación, Y nunca olvidaré cómo mis alumnos/as, con serias dificultades para relacionarse con los demás o para expresarse, me pidieron (y llevaron a cabo de manera extraordinaria) ser los protagonistas de las siguientes obras de teatro que llevamos a cabo a lo largo del curso. La transformación que vivieron nos dejó a todos sin palabras: alumnado y profesorado. Para finalizar el relato de mi experiencia, me gustaría que supieran que en este nuevo curso que ha comenzado quiero seguir haciéndoles sentir importantes (que lo son) por lo que juntos- as ya estamos pensando en nuevas ideas y muy pronto empezaremos a ensayar. También quisiera ampliar la actividad para dar cabida al resto de alumnado del centro que quiera participar (que no son pocos después del éxito cosechado), tanto en las obras teatrales como en nuestro programita semanal de radio y sé que mis compañeros/as me van a ayudar. Todos sabemos que es una fantástica forma de mejorar el nivel competencial general de niños y niñas porque no todo son pupitres, pizarras y deberes. Eso sí, nunca hay que olvidar las inyecciones de alegría y las grandes dosis de cariño en cada ensayo. Damas y caballeros… el telón de las oportunidades se ha abierto. Pag 41 - Tamadaba Nº21 - 2019