organización a través de la racionalización del trabajo en base a los niveles de
productividad del trabajador.
Por su parte, en cuanto a la teoría clásica de Henry Fayol (1841-1925),
se ocupó también del aumento de la eficiencia de la organización a diferencia
de Taylor mediante la teoría de la administración científica conocida como
fayolismo, asimismo desarrolló la clasificación y aplicación de los principios
generales y básicos de la administración: planificación, organización,
dirección, coordinación y control; por lo que sus ideas constituyen la base del
conocido enfoque clásico de la administración cuyos argumentos dominaron
el objeto de estudio de la ciencia organizacional durante las cuatro primeras
décadas del Siglo XX.
De igual forma, en términos del paradigma moderno, la teoría de las
relaciones humanas de Elton Mayo (1880-1949), surge para la cuarta década
del Siglo XX, a través del desarrollo de las ciencias sociales, por lo que hoy en
día se considera los grandes aportes científicos que hace esta teoría en
función del recurso humano en una organización, asimismo fue quien condujo
el famoso Experimento de Hawthorne, para lo que se antepone a la teoría de
los clásicos, por lo que el objeto de estudio de la ciencia organizacional desde
esta teoría se considera al trabajador como “factor humano” de gran
importancia dentro de los procesos organizacionales. En este sentido, se
enfoca desde el principio de dirección, donde se reconoce el factor humano
por lo que en base a Koontz y Weihrich (2007), dicen que se:
Requiere que se cree y sostenga un ambiente en el cual los
individuos colaboren en grupo para alcanzar los objetivos
comunes (…) se subraya la importancia de conocer y
aprovechar los factores humanos y de motivación (…) el trabajo
del líder o jefe no es manipular a las personas sino reconocer
qué las motiva (pág. 282).
Desde esta concepción teórica, en función de la teoría de las relaciones
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Artículo Arbitrado
“Administración Científica” vista en términos de aumentar la eficiencia de la