y de nutrición; de la vestimenta; de las estrategias de crianza de los hijos; de
los saberes relacionados con la naturaleza, entre otros.
Desde la teoría de género, Lagarde (2005): puntualiza la variedad de
formas de discriminación que se visualizan en la constitución del ser mujer en
niñas indígenas en sociedades patriarcales, basadas en clases sociales y
etnocéntricas. Desde la entrada patriarcal, destaca, en primera instancia, la
discriminación por razones de género. En segundo término, desde lógicas
clasistas, se consolida la discriminación por grupo de edad y por condición de
pobreza. En tercer lugar, la discriminación por pertenencia étnica se configura
desde características particulares por el hecho de identificarse como indígenas
(págs. 107-109).
Desde la perspectiva de la Sociología de la infancia, Unda, Mayer y
Llanos (2015): al referirse a la socialización escolar de niñas y niños indígenas,
sostienen que este proceso “ha permitido ampliar los horizontes de
socialización con lo cual se reconfiguran y transforman las relaciones entre
sujetos, entre las que se cuentan las de orden comunitario” (pág. 272); por otro
lado, los mencionados autores, explican que, la irrupción acelerada de las
tecnologías de la comunicación en la vida cotidiana de las comunidades da
lugar a nuevas formas de interacción y lenguaje en niñas y niños indígenas
que marcan un distanciamiento con generaciones anteriores presentes en
familias y comunidades (pág. 298).
1.2. Interacciones docentes-estudiantes y aprendizajes de género
Docentes y estudiantes interactúan en el aula escolar desde sus
necesidades, intereses, cosmovisiones y afectos particulares. Se establecen
relaciones de poder en función de roles específicos (docentes-estudiantes),
ciclos de vida (niñas, niños-adultos), géneros (mujer-hombre), pertenencia
cultural o étnica (autoidentificación como indígenas o mestizos), entre otros
132
Arbitrado
de la lengua materna; de las prácticas culinarias, de las formas de alimentación