Revista Scientific Volumen 4 / Edición Especial - Septiembre 2019 | Page 27

limitaciones de las prácticas. Es en este contexto, las nuevas prácticas inclusivas de acuerdo a Infante (2010b): “este último aspecto hace referencia a la construcción de sujetos/estudiantes de pedagogía desde discursos de inclusión que circulan y se reproducen en el ámbito educacional” (pág. 287). 2.3. La escuela como organismo reproductor de estratos de género y clase. Se ha llegado a la comprensión que en una escuela, que es capaz de potenciar a los más aventajados o dotados de cultura que es entregado generacionalmente por las familias, se tiende a transcribir la estructura de la desigualdad de la sociedad, que se tiende a reproducir la estructura de la desigualdad de la sociedad, generada a partir de la diferenciación de posesión de capitales económicos y culturales. Pero Madero (2011), considera que: Al interior de la escuela, la probabilidad de que todos los/las estudiantes comprendan la enseñanza de igual modo es escasa, como consecuencia de la mediación de patrones culturales y sociales que inciden en la capacidad de entendimiento de los estudiantes (pág. 137). En lo que respecta al ámbito nacional, visto desde la perspectiva de los autores consultados pasa a llevar los principios de un estado democrático, dado que si una sociedad es democrática debiera entender que se denomina nación justa a la que distribuye recursos y oportunidades educativas a todos sus miembros, en relación con el mérito de las personas y no a características sociales como la pertenencia familiar. 2.4. La ley de inclusión en Chile: un paso hacia adelante La ley de inclusión en Chile, otorga libertad de elección a todos los 26 Arbitrado sujetos a incluir no son los únicos beneficiarios y tampoco los que mantienen