llegado a funcionar en un contexto más amplio y con otro significado”. En este
contexto, “güevón” ha entrado en una etapa de transformación que lo aleja de
su acepción original, pues en primer lugar era una palabra muy malsonante,
un término exclusivamente utilizado por los sujetos, que expresa vulgaridad y
que al ser usado se establecía una relación directa con personas de genitales
voluminosos; no obstante, esa particularidad ha ido perdiendo su esencia,
pues ahora los estudiantes universitarios para comunicarse con sus pares la
usan con frecuencia, sin que su significado sea necesariamente “tonto,
estúpido o pendejo”.
Por su parte, el término “marico” o “marica”, en correspondencia con los
géneros de los interlocutores, es usada como un saludo o una muletilla en la
conversación. Esta palabra quiere decir camarada, amigo(a), y es empleada
constantemente por muchachos y muchachas.
En el discurrir del tiempo, el vocablo “marico(a)” se ha empleado para
agredir verbalmente a otra persona, considerándosele frecuentemente como
una falta de respeto. En el contexto del lenguaje juvenil de los estudiantes
universitarios se puede afirmar que esta forma de tratamiento nominal se
encuentra en una fase de conversión pues su forma de insulto se convierte en
una forma de expresión que denota anti-cortesía, la cual señala solidaridad,
perdiendo a la vez su característica agraviadora, dentro de un grupo etario
específico, conformado por jóvenes cuya edad está contenida entre 17 y 25
años de edad.
En la actualidad, los estudiantes universitarios emplean esta forma de
tratamiento nominal no sólo con la intención de fortalecer vínculos amistosos,
al igual que para manifestar expresiones que van desde la sorpresa ante un
hecho particular, la tristeza o la alegría ante otra situación y hasta para iniciar
o culminar los enunciados propios de sus conversaciones habituales, incluso,
desplazar otras formas de tratamiento nominal que jamás han sido
338
Arbitrado
(1983b:138), al señalar que esta palabra ha evolucionado, “por lo cual ha