Revista Scientific Volumen 3 / Nº 10 - Noviembre-Enero 2018-2019 | Page 162

y tiempo que combine la presencialidad y el aprendizaje grupal, con la formación a distancia o individualizada; agregándose la incapacidad para elaborar y seleccionar materiales y apoyos didácticos novedosos que faciliten y despierten en los niños el interés y la motivación para adquirir y reforzar conocimientos. - Se agrega, de acuerdo con los datos obtenidos en la encuesta aplicada a los 26 docentes, que apenas el treinta por ciento (30%) de los docentes involucrados, utilizan las TIC como un instrumento de innovación educativa, y aunque se cuente con cetros dotados de tecnología de punta, éstos no son usados en beneficio del proceso de enseñanza y aprendizaje. - Además, sólo un sesenta por ciento (60%), conoce las tecnologías y no en su totalidad; básicamente de la Internet, se valen de Facebook y del correo electrónico, en algunos casos se usan para los trabajos administrativos, y muy poco como herramientas didácticas de apoyo a la formación de los menores, para preparar las clases (5%), o para la programación de objetivos, contenidos y actividades relacionadas a las TIC. - Finalmente se expone, que tan solo un diez por ciento (10%), usa las TIC, para sus actividades fuera del aula; aclarando que muchos de los conocimientos sobre las tecnologías los han adquirido por ensayo y error, por interés personal, a través de la observación de videos, y en muy pocos casos con cursos particulares, que sólo permiten el manejo de lo muy básico; además de la presencia de altas ocupaciones laborales, que se traducen en falta de tiempo para estudiar, así como bajo interés, o ausencia de oportunidades y dinero para capacitarse en relación a ellas. Se destaca que los resultados demuestran que un bajo porcentaje de los docentes involucrados hacen honor a las tecnologías, tanto en su vida cotidiana, como en sus diferentes ambientes de trabajo pedagógicos. 161 Arbitrado nuevas técnicas, estrategias y medios para la educación, en cualquier espacio