Revista Scientific Volumen 2 / Nº 6 - Noviembre-Enero 2017-2018 | Page 85

Cuando se juega con el lenguaje se sitúan en marcha los mecanismos psíquicos de la imaginación y la creatividad, lo que se constituye en motor de crecimiento mental, físico y espiritual. Por ello, compartir la lectura como estrategia didáctica se tiene que consiste en: leer a los niños, leer con los niños y leer para los niños. La primera, leer a los niños sucede cuando se observa que los niños/as no están en capacidad de realizar lecturas por si solos, y cuando ellos lo soliciten, así ya estén alfabetizados. Entretanto, la segunda leer con los niños, consiste en acompañarlos durante la lectura de manera individual, respondiendo a sus solicitudes, ya sean estas interrogantes, dudas acerca de la interpretación del texto o simplemente cuando pidan ayuda para concluir la lectura. Por último, leer para los niños, tiene como finalidad hacer partícipes a los estudiantes de un texto que el adulto significativo disfrutó y sintió la necesidad de compartirlo. Generalmente este tipo de lectura es realizado en voz alta. La lectura como se ha señalado anteriormente, puede comenzar mucho antes que en la etapa escolar. Una vez que el niño alcanza ésta, se sugieren actividades que apoyen la transición a la palabra escrita. Esto se logra al fomentar que los niños usen estrategias como, por ejemplo, “la confirmación, la autocorrección, la predicción, la inferencia y la voluntad de arriesgarse”. Esto se logra mediante el uso de materiales auténticos, no de programas de libros de texto. 2.4. Enseñanza de la Escritura En relación con la escritura, ésta puede concebirse como un acto de expresión, el cual constituye no solamente un instrumento de comunicación, sino esencialmente una herramienta que permite al individuo reflexionar sobre 84 Arbitrado entrar en contacto con la literatura y jugar con el lenguaje literario creando y recreando: versos, poemas, rimas, coplas, retahílas, adivinanzas, refranes, cuentos, entre otros (pág. 49).