seleccionadas y planificadas por el docente, en virtud de las características del
grupo, del contenido a enseñar, de sus objetivos y de sus propias
características personales a fin de garantizar el éxito y el buen desempeño de
la misma. Al respecto Mayer (1984), Shuell (1988), West, Farmer y Wolf (1991:
23), definen las estrategias de la enseñanza, como los “procedimientos o
recursos utilizados por el docente, para promover aprendizajes significativos”,
es decir, que son las estrategias que pueden diseñar y utilizar en los
estudiantes, que consiste esencialmente en proporcionar una ayuda ajustada
a la actividad constructiva de los alumnos.
2.4. Estrategias de Aprendizaje de la lectura.
Una estrategia de aprendizaje es una acción que se complementa con
la ejecución de un conjunto de pasos o habilidades empleadas por el
estudiante en forma intencional, como un instrumento que genera la
oportunidad
de
aprender
significativamente
y
solucionar
problemas
relacionados con su entorno académico. En este sentido Díaz y Hernández
(2002c: 115), afirman: “Las estrategias de aprendizaje son ejecutadas
voluntaria e intencionalmente por un aprendiz”.
En otras palabras, una estrategia de aprendizaje puede resultar un
medio que un estudiante o cualquier persona llegue a utilizar como vía o
recurso para llevar a cabo la planificación de cualquier actividad relacionada
con la adquisición de un nuevo conocimiento o solución de un problema que
de alguna manera les proporcione resultados positivos a los objetivos previstos
y estén acordes con sus capacidades y limitaciones.
También para Goodman, (1982: 118), “El aprendizaje de la lectura
comienza cuando el niño va descubriendo y desarrollando las funciones del
lenguaje escrito, y cómo leer es buscar significados”, es decir, para el
aprendizaje de la lectura implica un nivel adecuado del desarrollo intelectual y
38
Arbitrado
facilitar el aprendizaje y comprensión de los estudiantes. Son previamente