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si dos cabras tengo y un techo pajizo, pues mejor que andar mendigando. 37 Mía mi casa, aunque sea pequeña: en ella soy yo mi señor; corazón dolorido el hombre lleva si se ha de pedir el sustento. 38 Ni un paso jamás de sus armas se aparte hombre que va por el llano: nunca se sabe por esos caminos cuándo hará falta la lanza. 39 Generoso no vi ni tan buen anfitrión que rehusara aceptar un regalo ni tan dadivoso que hallara molesto tener que aceptar a cambio. 40 Que nadie se prive y esté escatimando bienes que ahorrados tenga; se le guarda al querido y lo hereda el odiado. ¡Peor puede ir que se espera! 41 Con armas y paños se obsequian amigos, cada uno por sí lo ve; la amistad se prolonga, si bien va todo, entre dos amigos que se dan y toman. 42 Amigo el hombre será de su amigo, con regalo al regalo responda; la risa con risa se debe acoger, la doblez con engaño. 43 Amigo el hombre será de su amigo, de él y de amigo que él tenga; nunca el hombre amigo será del amigo de algún enemigo. 44 Si tienes amigo en el cual confías y sacarle provecho quieres, ábrete a él, cambiaros regalos, ve con frecuencia a su busca. 45 Si tienes a otro en quien poco confías y sacarle provecho quieres, finuras dile, más tenlo por falso; paga doblez con engaño. 46 Lo mismo con ese en quien poco cofías y que no le ves bien la intención: