REVISTA NUMERO 48 CANDÁS MARINERO REVISTA NUMERO 48 CANDÁS MARINERO | Page 23

`CANTARES… DE LOS DE ANTES´ La comunión entre concurrencia y grupo es total. Se suceden las habaneras: Sardinera, La batelera, El estropajo… Luego vendrán La negra Tomasa, La otra España y Resistiré, intercaladas estas entre los boleros. Le encandila Amar y vivir, pero su prefe- rida es Cruz de Olvido: “Con el atardecer, me iré de aquí, me iré sin ti…”. Se pone sensiblero y con la piel de gallina cada vez que los escucha cantarla. “Me alejaré de ti con un dolor dentro de mí…” Y así, casi sin darse cuenta, entre canción y canción, transcurre la hora larga de actuación que finalizan con Chalaneru y Candás tiene tres cosas, y como colofón el Asturias patria querida, gaita incluida, con la gente en pie, los brazos levantados, entrela- zando dedos meñiques, y entonando todos a una el himno asturiano. Pide otra pinta de vino -no sabe cuántas lleva ya- y una ración de chipirones para cenar. Después, cuan- do el grupo de cuenta del tapeo, se acercará hasta su mesa, lo conocen y la harán hueco,