Ahora que ya pasaron las fiestas y todo lo que esto
significa: divertirse, despreocuparse, relajarse, visitas a
amistades y familiares, etc., es momento de empezar a
pensar y a hacer lo necesario para sentirnos bien.
Algunas sugerencias por donde empezar:
Cambiar hábitos negativos o destructivos por otros más saludables.
Sanar las emociones negativas por entenderlas y aplicar su
opuesta. Ej. Sano el enojo por medio del perdón.
Dedicarnos más tiempo y no regalar o perder nuestro tiempo
con personas que no lo valoran o no lo necesitan realmente.
Todos podemos cambian nuestra vida totalmente, es sólo
cuestión de decidirse y empezar de una vez nuestra autotransformación. Está bien pedir ayuda o utilizar técnicas o
energía ¡Pero nunca olvidemos que siempre tenemos todo lo
necesario para hacer los cambios y vivir armoniosamente, en
nosotros mismos desde un principio!
Muy generalmente, no sabemos lo que somos capaces de hacer hasta que lo intentamos.
Los límites son siempre ficticios y estos son autoimpuestos o impuestos por otros. Pero rara vez
los conocemos por haber llegado hasta ellos. Y aún así, se puede llegar más lejos o superarlos, es
sólo una cuestión de actitud y de acción.
La receta que nunca falla: trabajo duro, paciencia y perseverancia. No contamos el factor
“suerte” porque como tal no existe, porque todo lo que nos pasa o deja de pasar es el resultado
de algo que hicimos, dejamos de hacer o permitimos o no que suceda… Entonces, antes de quejarnos porque “se me seca hasta una planta de plástico” o “si pongo una fábrica de sombreros, empiezan a nacer sin cabeza...”, sería necesario fijarnos y analizar qué estamos haciendo mal...
Porque existen muchas razones y motivos, ya sean generados por nosotros mismos o porque permitimos la interferencia de terceros, para que no podamos recibir todo lo bueno que el
Creador puede darnos. Así que empecemos a hacer más y a quejarnos menos (puesto que no sirve
para nada) porque nuestro cambio personal, ayuda al cambio total de la humanidad.
Si bien, como dicen “todos somos uno”, es más exacto decir que es el conocido efecto
“mariposa” en acción… algo pequeño que podemos hacer de bueno (y hasta pensar que es insignificante), tiene repercusiones positivas enormes e inimaginables para todos...
Revista Elevación
“Cuando ya no somos capaces de cambiar una situación,
nos encontramos ante el desafío de cambiarnos a nosotros mismos.”
Viktor Frankl (1905-1997) Neurólogo y psiquiatra austriaco.
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