bles , selladas con mucho cuidado , de forma tal que si se caen al agua , las pertenencias no se ven afectadas . Los elementos esenciales que se cargan son carpas , toldos , sacos de dormir , agua , mapas , faroles , un remo de repuesto , una garrafa , machetes y un botiquín .
En cuanto a los alimentos , todo depende de la cantidad de navegantes que vayan y , por supuesto , de la cantidad de días . “ Si vamos cuatro días , los dos primeros días comemos asado , llevamos heladeras con hielo y el primer día esta impecable , el segundo día lo sellamos para que no se eche a perder y el tercer día ya lo terminamos de hacer pasada por las brasas ”, comenta . El menú pasa también por arroz con atún , papas al fuego o estofado . El grupo hace mella de las habilidades culinarias de uno de sus integrantes , para deleitarse luego de todo un día de navegación .
Peripecias
Pero no todas las travesías han sido exclusivamente de disfrute entre amigos . De hecho , han tenido varias experiencias límites . Una fue en el río San José . “ Hace un par de años rompimos en una curva . Éramos dos canoas , los primeros se vieron trancados con un árbol y agujerearon la canoa . Nosotros veníamos atrás , cómo taponazo , y pudimos evitar el choque contra ellos , pero también nos dimos vuelta contra la orilla ”, recuerda Quaglia .
La canoa de sus compañeros quedó entonces fuera de combate y el equipo debió dejar las pertenencias en una isla . Fue en ese sitio donde repararon la canoa – una buena idea es siempre llevar con ellos resina y fibra de vidrio- para al otro día continuar el viaje .
El Río Yi siempre se complica Pag 9