Revista de viajes Magellan Octubre 2017 | Page 20

y ofrece vistas espectaculares de la zona vieja con el castillo en la cima. De la parte moder- na de la ciudad visitamos la zona de Mont- calm, cerca de los campos de Abraham con muchas construcciones clásicas y típicas, tiendas y restaurantes. Aquí está el museo de Bellas Artes. Callejear por esta zona y la con- tigua Haute-Ville merece mucho la pena. Dejamos para el día siguiente el cercano Parque Tribal de los Hurones, 15 Km al noroeste. Es un parque pequeño pero muy interesante. Allí conocimos las costumbres y la forma de vida de estos indios, su organiza- ción y como siguen conservando sus tradicio- nes hoy en día. Se pueden visitar diferentes construcciones y objetos típicos en una visita muy didáctica. Después nos desplazamos a la basílica de Sainte-Anne-de-Beaupré, 35 Km río abajo desde Quebec. Es un impresionan- te templo de dimensiones colosales. Después visitamos las cercanas cascadas de Mont- morency. Es una cascada enorme, 30 metros más alta que la del Niágara. Hay un circuito habilitado para su visita que te permite visitar la zona inferior, subir por una serie de pla- taformas y escaleras hasta la parte superior y finalmente cruzar el río por encima de la caída de agua. Es un recorrido espectacular. Todo el circuito nos llevó cerca de dos horas. Visitadas las cascadas pasamos a la isla de Orléans en el río San Lorenzo y unida a tie- rra firme por un puente. Es una isla muy rural con algunos rincones encantadores. Pernoctamos cerca de allí y seguimos hacia el norte recorriendo la costa de Charlevoix. Esta región de Quebec se caracteriza por estar Place Royal en el viejo Quebec 20