Instituto Superior Marista (A-730)
Nos maravillamos conociendo la capacidad con
que se han organizado en búsqueda del bien
común: la comisión del tractor comunitario y la
comisión de la capilla, son algunos ejemplos.
Desde nuestra llegada las escuelas nos abrieron
las puertas, pasando a ser por esos días nuestro
hogar.
Todo fue un aprendizaje: adaptarnos inicialmente
a las limitaciones del medio físico, en relación a las
distancias, la falta de luz y la escasez del agua, así
como la convivencia entre los miembros del grupo
misionero, dándonos la posibilidad de conocernos
y descubrir la capacidad de amor y entrega que
hay en cada uno.
A lo largo de la semana «los chicos de las
escuelas» fueron los grandes protagonistas. Nos
recibieron con una inmensa alegría, rodeándonos
con su constante presencia y entregándonos
generosamente sus demostraciones de afecto.
Más allá de los aprendizajes pedagógicos, que
fueron muchos, esta experiencia ha sido una gran
lección de vida para todos los que participamos
y una valiosa oportunidad para alimentar nuestro
espíritu. Cada una de las alumnas del Nivel
Terciario, futuras maestras del nivel Inicial y/o de
E.G.B., han manifestado la verdadera vocación
que tienen de ser docentes. Esto se evidenció en
su interés permanente por realizar propuestas
acordes y significativas, en su responsabilidad
para ejecutarlas, en su atenta mirada a las
necesidades que surgían, en su capacidad de
trabajar en equipo, en su generosidad en la
entrega y en el compromiso con que se brindaron
a cada instante transmitiendo mucha comprensión
Aula Magna - Nº 10
Antes de partir hacia Santiago del Estero muchos
nos preguntábamos: ¿Podremos? ¿Sabremos qué
hacer?... Y la respuesta llegó en cada momento y
situación haciéndonos sentir la presencia de Dios,
quien a través de n