Instituto Superior Marista (A-730)
Aula Magna - Nº 10
Nos parece que es tan poco lo que se puede lograr
en una semana de trabajo, pero, en realidad, es
mucho porque como grupo misionero reconocemos que hemos sido misionados nosotros.
Es muy gratificante ver que ellos año a año
nos están esperando con las puertas abiertas
de sus corazones, y esto nos habla de la
constante presencia de Dios, que hasta que no
lo experimentas no lo podes contar. Los chicos
tienen mucha creatividad adormecida, por lo que
con un poco de motivación se ponen en acción
y son maravillosos. Ellos desarrollan sus dones
ya sea en el dibujo, en la pintura, en el baile, en
la expresión teatral, en las cosas manuales, etc.
Testimonio desde la Esc. N° 442 en
el paraje La Costa 1°
A pesar del cansancio y de los efectos del clima
siempre teníamos ganas de seguir. Para vencer
esto sólo nos poníamos confiadamente en las
manos del Padre, para seguir sosteniendo una
misión con todo lo que implica.
Una experiencia con la participación del Nivel Terciario
del Colegio marista de Lugano
Como comunidad misionera hemos vivido un
clima de fraternidad y respeto mutuo. Por sobre
todo, cada uno ha puesto su granito de arena
para que la convivencia diaria tenga un sentido
y ese sentido sea Jesús, porque en definitiva
toda misión es obra de él. Por eso doy gracias a
quienes conformaron conmigo esta comunidad
misionera «color verde».
Este año, por primera vez, el Nivel Terciario del
Colegio marista Macnab Bernal (Lugano) recibió la
invitación a participar de la Experiencia Pedagógica
Misionera que desde hace varios vienen realizando
Hermanos, alumnos, docentes y exalumnos del
Instituto Superior Marista. El Hno. Horacio Bustos
es el impulsor y guía de esta misión, y desde hace 8
años concurre con grupos de jóvenes misioneros a
trabajar en varias escuelas rurales de los municipios
de Icaño y Colonia Dora, en la provincia de Santiago
del Estero.
Sentimos que ésta es una propuesta que vale la
pena. No es cuestión de dudar; es cuestión de
decir sí aunque haya obstáculos. Cuando una
cosa viene de Dios no hay nada que la detenga.
Queremos agradecer el testimonio de disponibilidad
y entrega del Hno. Horacio quien siempre nos
transmitió paz y serenidad con su frase: «Todo se
va solucionar, confiemos en la Virgen». Por eso le
decimos gracias por su ejemplo de vida entregada
al Señor y el ardor misionero que posee.
A la profesora Norma que siempre está para darnos
aliento, transmitiéndonos alegría y entusiasmo, le
decimos gracias por su testimonio misionero y
por los gestos de confianza y generosidad que
trasmite, no sólo en la misión sino también en el
día a día del quehacer educativo en el ISMA.
Gracias a todos los que hicieron posible esta
magnífica experiencia misionera. Gracias porque
hemos vivido una experiencia profunda de
encuentro con Dios y con los demás.
Miembros de los dos Institutos maristas de
Formación Docente compartimos esta hermosa
experiencia. Ambas comunidades maristas: ISMA
y MACNAB BERNAL, iluminados por el lema «Un
corazón... una misión», trabajamos con enorme
entusiasmo dando nuestro testimonio de fe.
La experiencia vivida ha sido altamente gratificante
y enriquecedora para los que participamos. Se
hace muy difícil transmitir todo lo vivenciado día
a día junto a estos niños y sus familias, quienes
desde nuestra llegada nos brindaron su calidez y
agradecimiento por estar junto a ellos. Lo expresaron
con sus miradas, sus sonrisas, su participación en
las propuestas y con la apertura de sus hogares.
Ellos nos han testimoniado, con la simpleza que
los caracteriza, el valor que le dan a la familia y su
esperanza por prosperar.
Hna. Ángela Ojeda
3º año Ciencias Sagradas – ISMA
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