• EL BARROCO Y LA CONTRARREFORMA
Con la aparición de la Reforma Luterana y las corrientes protestantistas y la correspondiente Contrarreforma de la Iglesia, el asunto religioso vuelve a cobrar importancia, restándosela al racionalismo del periodo anterior: el teocentrismo retorna y el catolicismo deja claros sus principios.
Así, destaca la irracionalidad del Barroco donde vírgenes, santos,… inundarán edificios, concebidos ahora desde una complejidad formal. No destacan grandes construcciones barrocas, ya que en muchas ocasiones se añadieron altares o capiteles góticos a edificios renacentistas.
•El imperialismo / Idealismo y Neoclasicismo
Con la llegada de nuevas corrientes de pensamiento como la Ilustración y su racionalismo vino también el Idealismo, que influyó en filósofos de la talla de Kant y cuya consecución directa en arte fue el Neoclasicismo.
Así, se construyen nuevos y grandes edificios, respetando proporciones y reflejando el clima imperialista. Se refleja el poder, la exactitud y la razón. Es la época en la que toman cuerpo edificios como la Ópera parisina.
• Revolución Industrial: marxismo / Arquitectura del hierro
En el siglo XIX la Filosofía da un viraje, y destacan varias teorías coetáneas: el marxismo y el materialismo -muy importantes en el pensamiento de este siglo pero que no tuvieron apenas de repercusión en Arquitectura a excepción de algún totalitarismo comunista del siglo XX- el utilitarismo, que confía en el progreso y en la ciencia junto con el positivismo, pero no se preocupan por la situación del proletariado como las primeras.
Paralelamente aparecen nuevas tendencias arquitectónicas de estilo idealista como el romanticismo, neogótico, Art Decó,… No obstante la que más destaca es la arquitectura del hierro y del cemento, consecuencia directa de la industrialización y sus nuevos materiales. Es la que se aplica a los edificios públicos funcionales. Se pierde así, parte de visión estética en favor de ciudades industrializadas, rudas, “grises”,…
• Crisis y nuevas tendencias
Con la llegada de la contemporaneidad y el siglo XX se intenta dejar atrás el desprestigio y la inestabilidad del siglo XIX.
En el campo filosófico nacen nuevas teorías irracionalistas en contraposición a todo lo anterior: el psicoanálisis de Freud, las concepciones de Nietzsche, etcétera.
En el campo arquitectónico también encontramos el rechazo a lo establecido: Bauhaus, futurismo, o Le Corbusier, relacionado con Nietzsche y su inversión de valores con los edificios separados del suelo.
"La arquitectura es el testigo insobornable de la historia, por que no se puede hablar de un gran edificio sin reconocer en él el testigo de una época, su cultura, su sociedad ysus intenciones. . ."
Pablo Liñán Contreras, 2º BCB
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