de 8 a 9 años ( Cooper , 2018 ). Se debe sospechar de DECEC en cualquier úlcera corneal que no sane con tratamiento convencional , teniendo en cuenta que una lesión sin mayor complicación debiese sanar en un periodo de 7 a 14 días ( Bentley , 2005 ).
Si bien generalmente esta condición es unilateral , debe llevarse a cabo una exploración completa de ambos ojos ( Turner , 2010 ), esta exploración debe ser muy detallada para eliminar cualquier causa subyacente que pueda causar un retraso en la reparación normal de la herida , como un trauma mecánico constante por una malformación del párpado ( neoplasia , entropión , lagoftalmos ), cuerpos extraños , infecciones , anormalidades en la película lagrimal , exposición ( conformacional , neurogénico , segundario al globo ocular como exoftalmos o buftalmos ) o edema corneal segundario a queratopatía bullar . Si alguna de estas condiciones es encontrada , el tratamiento de ellas mejorará la úlcera ( Bentley , 2005 ; Cooper , 2018 ).
El DECEC rara vez estimula la vascularización en los estadios iniciales y éste es un rasgo diagnóstico provechoso , sin embargo , la vascularización puede ser rápida y marcada en el Bóxer o crónica en otras razas . La vascularización no colabora con la curación , pero puede redundar en una cicatriz y tejido de granulación sustanciales a pesar del tratamiento ( Slatter , 2004 ). Inicialmente las lesiones tienen una respuesta inflamatoria inefectiva e incluso de manera crónica puede haber falta de vasos sanguíneos , pero como se mencionó anteriormente , esto puede ser altamente variable ya que mientras más periférica es la lesión , más probablemente estará vascularizada ( Murphy et al ., 2001 ).
El diagnóstico también se ve favorecido por el aspecto clínico típico . Un borde de epitelio suelto alrededor de la erosión es característico en el DECEC . La erosión se destaca por la tinción difusa con fluoresceína , un anillo menos intenso de tinción rodea el defecto . La lesión es superficial , sin pérdida de estroma . En el caso de existir edema corneal , éste se limita al área de la erosión . El edema estromal difuso implica que la enfermedad endotelial , con edema corneal secundario y queratopatía ampollosa , esta es la causa
20 subyacente más probable de la erosión . La cantidad de blefaroespasmo , epífora y vascularización corneal varía enormemente ( Ledbetter y Gilger , 2013 ; Bentley , 2005 ; Murphy et al ., 2001 ). Primero se debe realizar un test de Schirmer para descartar queratoconjuntivitis seca no tratada , luego se aplica fluoresceína , la que difundirá bajo los bordes de la lesión , si se desbrida este epitelio y volvemos a teñir con fluoresceína entonces se expondrá un área bastante más grande de lesión que la anterior , esta prueba , junto con los signos clínicos , es lo que orienta al diagnóstico definitivo de DECEC ( Bentley , 2005 ; Kirschner et al ., 1989 ; Stanley et al ., 1998 ; Cooper , 2018 ).
Existen diversas opciones de tratamiento para el DECEC , y los propietarios deben ser educados de que es posible que se utilice más de un tratamiento para llegar a la resolución de la lesión ( Ledbetter y Gilger , 2013 ; Turner , 2010 ). Como tratamiento base del DECEC se deben usar antibióticos profilácticos cada 6 , 8 o 12 hrs ., un cicloplégico como atropina 1 % para mitigar el dolor usualmente durante 1 a 3 días y un collar isabelino para mitigar el trauma local ( Ledbetter y Gilger , 2013 ; Turner , 2010 ; Bentley , 2005 ).
Con respecto al tratamiento médico , el desbridamiento de todo el epitelio suelto es fundamental para lograr curación , suele hacerse con anestesia tópica , pero si el paciente resiste o bien el anestésico no logra el efecto deseado , se somete a sedación , se inmoviliza la cabeza del paciente y con una torunda de algodón seco estéril se remueve la totalidad del epitelio sobrante , con este procedimiento la úlcera aumentara su diámetro considerablemente , lo que es conveniente advertir al dueño . Una semana después se debe revisar al paciente , si hay una mejoría significativa ( reducción del 50 % del tamaño de la úlcera sin presencia de reborde de epitelio no adherido ) se continúa con el tratamiento y en 7 días posteriores la úlcera debería presentar remisión completa ( Turner , 2010 ; Bentley , 2005 ; Janssens , 2007 ; Maggs , 2009 ). El éxito de esta técnica por si sola para lograr una mejoría completa es bastante variable entre estudios , con rangos de éxito de un 20 % ( 2 de 10 ojos , con 14 días de