El tejido óseo
1. Venegas Acosta JC, Garzón Alvarado D, Casale M. Interacción entre osteoblastos y superficies de titanio: aplicación en implantes dentales. Revista Cubana de Investigaciones Biomédicas. 2010; 29(1).
2. Ross MH, Pawlina W. Histología texto y atlas. Correlación con biología celular y molecular. 7th ed. Mendoza C, editor. Barcelona: Wolters Kluwer; 2016.
El tejido óseo es un tejido conjuntivo mineralizado constituido por células especializadas, fibras extracelulares de colágeno, matriz fundamental calcificada, elementos medulares y vasos sanguíneos que atraviesan todo el tejido aportando la nutrición que requiere
El hueso está compuesto de tres tipos celulares: osteocitos, osteoblastos, osteoclastos.
Estas células se verán afectadas en el proceso de regeneración-reparación ósea.
En base a la disposición de las lamelas es posible clasificar el hueso en dos tipos: cortical o compacto y trabecular o esponjoso.
La densidad del hueso disponible en un área edéntula es un factor determinante en el plan de tratamiento dental, el diseño del implante, la técnica quirúrgica, el tiempo de cicatrización y la carga ósea inicial progresiva durante la rehabilitación protésica.
El remodelado óseo es un proceso esencial en la determinación de la calidad ósea, ya que condiciona la arquitectura, la mineralización y la geometría ósea. El remodelado es, en particular, el fenómeno dinámico mediante el cual el tejido óseo es activamente reabsorbido y reemplazado por tejido nuevo durante toda la vida del individuo mediante la remoción de hueso antiguo o viejo, este proceso es llevado a cabo por los osteoclastos; y la aposición de hueso nuevo, asumida por los osteoblastos.