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PULSO Cajamarquino
Cajamarca, 17 de marzo del 2014
MEGAINCAPACIDAD
PRESA CHONTA Y FERROCARRIL NORANDINO
Q
ue el municipio
provincial haya
impedido la
posible ejecución de la presa Chonta
ha causado tanto ruido
como la caída de agua
que esta mega estructura tendría de estar funcionando o una sordera
mayor que la provocada por ubicarse cerca
de la vía férrea del
Ferrocarril Norandino
olvidado por el Gobierno Central.
Como se nota, en esta
aventura de mega proyectos han demostrado
incapacidad ambas
entidades, la nacional
con Ollanta Humala a
la cabeza y la sub nacional con Ramiro Bardales a los pies, pero ha
tenido un único perjudicado, el pueblo, que
reclama voluntad política y de desarrollo de
sus autoridades antes
que juegos políticos.
Debemos rescatar,
entre tanto desatino, el
trabajo realizado por el
difunto Pablo Sánchez
Zevallos en lo referente
a la Presa Chonta y el
financiamiento brindado por la Asociación
Los Andes de Cajamarca –ALAC para realizar
los estudios de factibilidad de ambas mega
estructuras, aunque su
financista Yanacocha
siga paseándose en su
laberinto.
De la presa Chonta se
ha dicho bastante, del
lado nacional que no va
y de parte del municipio que el proyecto ha
sido declarado de necesidad pública por el
Congreso de la República y esto hace que
vaya sí o sí, queriendo
interpretar el comunicado que vienen difundiendo en algunos
medios locales los ediles de la gestión “Bardales”.
Es por eso que en esta
oportunidad –y mientras se define si va o no
va Chonta al estilo Conga- nos ocuparemos
junto al gerente de Proyectos e Infraestructura
de ALAC, Guido Castillo Olazábal, del Ferrocarril Norandino.
El ejecutivo minero
acusa al presidente del
Ing. Guido Castillo Olazábal
COMPOSICIÓN FOTOGRÁFICA
Cuando la incapacidad y el juego político se unen para decir no al desarrollo de un país.
Perú Ollanta Humala
Tasso de haber “paralizado” el proyecto aunque recordó que él
mismo en su discurso
inicial manifestó “interés por el desarrollo de
la red ferroviaria del
país en general”, pero
“las acciones de estos
dos a tres años de
gobierno no han mostrado evidencias de
que se desarrollen”
tales intenciones.