en tanto que utiliza un soporte cerrado, está limitado a lo previsto por el autor de la obra.
Según la acepción del concepto que usamos en este trabajo, los sistemas hipermedia se basan en la suma de las potencialidades hipertextuales y multimediáticas aplicadas a un soporte abierto o online, como es Internet. Actualmente, estas potencialidades convergen principalmente en la World Wide Web, la aplicación hipermediática de Internet. Estos sistemas permiten interconectar e integrar conjuntos de información prácticamente ilimitados, representados en múltiples materias expresivas que, además, pueden estar interconectadas; es decir, un texto verbal nos puede remitir a un sonido, y una imagen puede enlazarnos con una base de datos, por ejemplo.
Los sistemas hipermediáticos pueden favorecer más a los procesos de comunicación interactiva que a los de información o de lectura, entendiendo que tienen la potencialidad – en tanto que utilizan soportes abiertos – de vehicular eficazmente información multimediática interconectada en los dos sentidos del esquema comunicativo. Según esto, el hipermedia es el lenguaje que habría de utilizar el nuevo medio de comunicación interactivo por red, que definimos como " Netmedia ". Actualmente, el uso del hipermedia se limita principalmente a la World Wide Web. No obstante, algunos modelos de televisión por cable que combinan servicios interactivos y el acceso a Internet ya han comenzado a incorporarlo a los nuevos sistemas de interacción.
Del hipertexto al hipermedia
Una definición acertada de Hipermedia nos la da el profesor Arturo Colorado Castellary para quien el concepto se refiere a“ cualquier sistema de base informática que permita la conexión interactiva, y por lo tanto de travesía no lineal, de la información que es presentada en múltiples formas que incluyen texto, gráficos fijos o animados, fragmentos de películas, sonidos y música”. La clave no está en el peso de lo textual frente a lo multimedia o viceversa, sino en ofrecer distintos formatos( vídeo, fotografía, imágenes en movimiento, gráficos, infografías, audio, etc.) que permiten un consumo no líneal y no secuencial del contenido, imitando de algún modo más adecuado a la realidad la manera en la que aprendemos y en la que nuestro cerebro interpreta la información. Por tanto, el verdadero poder recae en la proactividad y el papel protagonista de la persona que consume los contenidos hipermedia, ya sea en la web, en aplicaciones para dispositivos móviles o tablets, etc.
Frente a otros productos culturales previos, nos encontramos con la particularidad de que el contenido ya no es únicamente un producto cerrado y con una autoría clara, sino que cualquiera puede ampliar la información en múltiples formatos y de muy diversas fuentes. El producto hipermedia“ potencia el diálogo entre los actores de los procesos comunicativos, como consecuencia del carácter abierto y plural de su lenguaje y de su estructura”( Carles Tomàs i Puig) con la intereactividad y bidireccionalidad típica del soporte en el que se generan este tipo de contenidos. El sujeto pasivo del consumo de contenidos previo al hipertexto e hipermedia puede ahora convertirse en actor de los mismos allá dónde, cuándo y cómo quiera consumir la información, especialmente con la llegada de los dispositivos en movilidad. Un actor que puede colaborar con el autor( por ejemplo tuitearle en directo para solicitar información), colaborar con otros en la creación y generación de nuevos contenidos( Open: Open Innovation, Open Government, Crowdsourcing …), elegir a qué ritmo consume el contenido y convertirse en la fuente emisora por la capacidad de compartir y distribuir las diferentes piezas que conforman el puzzle de un producto hipermedia.
Para Tomás i Puig, las obras hipermedia tienen tres características fundamentales:
• Acceso no lineal a la información, lo cual implica la inexistencia de un único hilo discursivo, rompiéndose así la secuencia única como principio ordenador de la información.
• Supresión de los factores delimitadores y de los límites significativos del producto cultural, convencionalmente condicionado por la utilización de un soporte cerrado – como un libro impreso – y de unas determinadas materias expresivas, que impiden la interconexión y la integración de la información.
• Desdibujamiento de la autoría centralizada, motivado por las interconexiones e integraciones que el usuario puede establecer con otros textos, obras y autores, y por su capacidad de convertirse en emisor.
Transmedia y Crossmedia
Pretende describir cómo es el fenómeno de cómo es la narración de las historias en la era de la convergencia digital y de medios. Por Transmedia cabe entender historias que no caben en un único medio, que crecen por más medios( de un largometraje surge un juego, comics, libros, etc.) Ello se diferencia del crossmedia en la medida en que se pretende que cada parte de la historia sea autónoma, pero contribuya al conjunto total del universo que esa historia representa.
Lo verdaderamente importante es que para que tenga interés de verdad para la audiencia, cada vez que cruces de medio, cada vez que la historia pida ir a otro lado, necesitamos que sea autónoma y cualquiera la pueda consumir sin necesidad de ver lo que hay previo o lo que está en otros medios.
Según Máximo Martinoti, uno de los expertos más importantes del mundo sobre el tema, asegura que“ Transmedia no significa nada en realidad, es prácticamente equivalente a crossmedia. El término correcto es Narrativa Transmedia ya que esto implica que la historia se desarrolla a través de diferentes medios y plataformas”. Por tanto, utilizar la palabra transmedia sin nada más es como si las empresas afirmasen“ tengo una web”.
Sobre todo, es un suceso: algo que está pasando. El reto es comprender las claves narrativas para generar estructuras de explo-
14 Nuevos medios, nuevos formatos y nuevos conceptos