Prehistoria de extremadura PREHISTORIA EXTREMEÑA revisado n 2019 | Page 164
de Guimeraes (Portugal), mientras que el de Mérida es más de tipo oriental,
traídos quizás con el comercio fenicio. En el jinete de Mérida, Forner, vio
una representación del mito de Melenao y sobre todo de Cartago, norte de
África y sur de Italia.
En 1920, fue descubierto bajo la azada, por un muchacho el tesoro
de La Aliseda. Sacaba arcilla para un tejar cuando apareció lo que más
tarde se convertiría en el magnífico tesoro. Una de las joyas hispanas de
orfebrería en oro. José Ramón Mélida intervino y tras numerosas vicisitudes
las joyas pudieron ir a parar finalmente al Museo Arqueológico Nacional.
Parecen pertenecer al período orientalizante o tartéssico (siglo Vi a. de C.)
enclavado dentro de una tumba no excavada sistemáticamente. Parece
tratarse de un ajuar de una dama de un alto rango que poseyó los más
sofisticados y refinados productos de orfebrería tartéssica de la época. Su
orientación orientalizante le hace deudor del mundo fenicio y tal vez fue un
producto de importación comercial altamente cualificado. Como señalamos
es tal vez uno de los objetos más importantes que se conservan de la antigüe-
dad prerromana peninsular.
Las joyas las forman un cinturón, diferentes piezas menores, pen-
dientes, brazaletes, anillos, sortijas, sellos y colgantes.
El cinturón consta de 61 piezas, 59 en el cuerpo del propio cinturón
más las placas de los extremos. Mide 68 cm. de longitud por 7 cm. de an-
chura. El cinturón está surcado por dos pares de finas líneas incisas, que lo
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