Philosophically Speaking: Annals of the International Philosophy Grou Philosophical-Annals-I-2016 | Page 14

ANTI-TEO Vivir, pensar y saber en la realidad
se impone el monoteísmo como negación de los dioses de otros pueblos 2 . Cuando Babilonia
invade los dos reinos de Israel y Judá, somete a su población, que es llevado al destierro a
diversos rincones del poderoso imperio mesopotámico. Allí, los sacerdotes judíos reivindican
su identidad religiosa como modo de cohesión de aquel pueblo vencido. En aquella época no
existía el concepto de “Nación”, todo se seguía según a un sentimiento de pertenencia a una
comunidad política (que no es lo mismo, ya que no se determinaba cultural ni
territorialmente) o la lealtad a una dinastía. Y en otros, como es el caso de Israel, a la
identidad religiosa. La debilidad del pueblo judío sometido provocó una intensidad religiosa
enorme que fue desarrollándose hacia un monoteísmo pleno que no reconocía ni siquiera a
dioses menores. Este desarrollo se puede comprobar en la propia Biblia, donde en un
principio reconoce la realidad de otros dioses, como Baal (solo que más débiles e inferiones a
Yahvé), para posteriormente confirmar la existencia de uno solo y verdadero, el Dios israelita.
Liberado posteriormente el pueblo judío por la victoria persa frente a los babilonios, se
estableció un Estado israelí monoteísta con una gran homogeneización social. Y vemos,
además de todo esto, más rasgos humanos en su invención: los profetas monoteístas siguen
las normas sociales: un varón con características que desarollan la idealización de lo que
quiere su sociedad, para su asimilación, tales como padre de familia, pastor, edad avanzada
como muestra de sabiduría, etc. En otras religiones, por las propias necesidades sociales, esto
cambia: soltero, santo, ermitaño... que dedican su vida a Dios y son símbolos de pureza frente
a un mundo corrupto y malvado. Algo que ya se concebía socialmente antes que
religiosamente, por los diversos conflictos históricos que se iban produciendo. De hecho la
misma idea de Dios se va transformando. Llegará a ser el alter ego de los hombres, un reflejo
del ideal humano, que se convertiría pronto en la fuente de justificación y razonamiento de la
autoridades, la Gran Autoridad. La idea de los dioses se convirtió de repente en una idea
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Todo este proceso lo podemos seguir en La Biblia Desenterrada de Finkelstein y Silberman. Especialmente en
los capítulos 9 y 10 sobre cómo se forma la religión judía y la Biblia, y la segunda y tercera parte del libro
para conocer el desarrollo histórico del pueblo judío. Siglo XXI tiene una buena edición de esta obra.
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