NO SE TRATA DE AMOR A SÍ MISMO
Se dice que amando aprendemos a ser personas libres. Que el punto de partida es la experiencia en nuestra vida. Pero en realidad, la mucha experiencia no garantiza el amor, ni el mucho amor nos indica que hemos amado bien. Todo en la vida no es lo que pensamos que sería, ni garantiza nuestra felicidad. Pero hay formas que enseñan más que otras, que engañan menos. Una de esas formas es el Arte. El arte es amar pensando, pensar en "amando", vivir pensando que amamos, hacer lo que pensamos que amamos.
¿Quién es el hombre para que te acuerdes de él?
Guarda tu lengua del mal
y tus labios no digan engaño.
Apártate del mal y haz el bien,
busca la paz y síguela de cerca.
Los ojos del Señor sobre los justos,
sus oídos a los ruegos de ellos.
Pero el rostro del Señor
sobre los que hacen mal,
para borrar de la tierra su memoria.
Clamaron los justos y el Señor los oyó
y de todas las angustias los libró.
Cerca está el Señor de aquellos
que tienen el corazón quebrantado;
a los humildes de espíritu los salvará.
Muchas son las aflicciones de los justos
y de todas los librará el Señor.
Guarda el Señor todos sus huesos,
ni uno sólo será quebrantado.
SALMO 33
Las criaturas es donde Dios puso y "pone Sus Ojos". Les ha dotado de Su sensibilidad y de Su Amor, es su propia facultad, la de "dar a luz"; así, es posible mirar el mundo con corazón y sabiduría, sin que sepamos muy bien como llegan esos sentimientos a nuestros sentidos.
El hombre, en la oscuridad de su propia mente, se siente alejado de esa unión, duda de esa unión vital con su Creador, del don de la Sabiduría y de Bondad de Dios.
Así, cuestionandose lo que Dios ha creado para su bien, empieza a andar un camino propio en solitario, lleno de dudas y de dolor. Pero el hombre no está solo, la señal es que ama sin entender cómo.