El conflicto de interés en el ámbito universitario
que el bien público si quienes toman las decisiones son además quienes pueden beneficiarse de negar o demorar la divulgación de la información científica.
La publicación de una investigación puede ser afectada de distintas maneras. En el peor escenario, los intereses privados pueden hacer que los investigadores supriman o alteren información que podría ser dañina para intereses externos. Un resultado menos notorio, pero igualmente inaceptable, sería la mera demora de la publicación de datos con el fin de obtener una ventaja competitiva.
La competencia entre grupos de investigación es un fenómeno bastante común en los campus universitarios. Sumarle el ánimo de lucro personal a las razones por las cuales los investigadores quieren ser los primeros en presentar una idea, puede ser un golpe mortal para la noción de cooperación entre colegas, resultando en investigadores que se vuelven cada vez más herméticos y posesivos de sus hallazgos.
El uso de recursos públicos para beneficio privado
La principal preocupación en relación a los conflictos de interés, tanto de los legisladores como de los periodistas, se concentra en el uso inapropiado o no autorizado de los recursos públicos para el beneficio privado. Pero ni siquiera las universidades privadas están inmunes a este tipo de preocupaciones sobre la malversación de los recursos públicos, porque la gran mayoría de fondos para la investigación provienen de agencias públicas financiadas con dineros públicos. Los legisladores y periodistas, quienes se consideran guardianes que actúan en nombre de la sociedad, son conscientes de la fuente de donde provienen estos dineros. Algunos hasta insisten que cualquier recurso utilizado por las instituciones de educación superior, sin importar su fuente, son esencialmente públicos.
No debemos olvidar que los recursos incluyen no sólo el dinero y el tiempo del personal, sino también el uso del nombre, de las instalaciones y de los equipos de propiedad de la universidad. El nombre de una universidad es un bien valioso y los intereses privados a menudo pretenden aumentar el valor de sus productos y servicios en el mercado colocando la reputación de una universidad detrás
Paradigmas, ene.-jun., 2011, Vol. 3, No. 1, 58-75 | 69