- Richard Ewing “Dick” Powell, director de la película. Apenas 6 años después de terminar el rodaje, el 27 de septiembre de 1962, Powell reconocía, públicamente, estar siendo tratado de un cáncer en el cuello. Fallecía un año más tarde, el 2 de enero de 1963, por un linfoma. Tenía 58 años.
- Pedro Gregorio Armendáriz Hastings. Más conocido como Pedro Armendáriz y uno de los actores mexicanos más famosos de Hollywood en los años 50. Poco tiempo después de concluir su papel en “El conquistador de Mongolia” comenzó a sufrir fuertes dolores en la zona pélvica. Los doctores del Centro Médico de UCLA, en California, le descubrieron un cáncer en la cadera. A pesar de ello, actuó en la famosa película de la saga de James Bond “Desde Rusia con amor” soportando fuertes dolores (se le puede ver cojear ostensiblemente en el film) para dejar saneada económicamente a su familia. Murió a los 51 años, el 18 de junio de 1963, después de dispararse en el corazón con una pistola que había introducido en el hospital de manera clandestina.
- Susan Hayward, famosa actriz de Hollywood ganadora del Oscar en 1958 por su papel en la película “I want to live!”. Se le diagnosticó un tumor cerebral en 1973. Murió como consecuencia de ello dos años más tarde, el 14 de marzo de 1975 después de sufrir un colapso en su casa de Beverly Hills. Tenía 57 años.
- Agnes Robertson Moorehead, que se hizo famosa por interpretar a Endora en la serie televisiva “Embrujada”, lo que le proporcionó premios tan prestigiosos como el Globo de Oro o el Emmy. En 1953 consiguió un papel en “El conquistador de Mongolia” y sería uno de los primeros miembros del reparto que, años después, sospechó de la conexión entre los casos de cáncer presentes en el personal del film y las pruebas nucleares del desierto de Utah. En 1974 murió debido a un cáncer de útero. Su amiga Sandra Gould, que había compartido reparto con Moorehead en “Embrujada” recuerda que mucho antes de serle diagnosticado el tumor, Agnes le relató los rumores de que existían “gérmenes radiactivos” durante el rodaje de la película en Utah. Le enseñó una fotografía de algunos miembros del rodaje y le dijo que, todos ellos, “habían enfermado de cáncer y habían muerto”, lamentandose luego de que “nunca debí formar parte de aquella película”.