bocados
No quiero despertar y saber que ya no estás.
Hay que exorcizarme, dejar de respirarte por las calles y pasear tus recuerdos en las aceras.
Hoy pasé cerca del lugar de nuestras mentiras, y qué digo cerca, estuve recogiendo los pasos de un camino que tal vez nunca debió ser vivido.
Tenía miedo, estaba ansiosa por verte, pero no, debo confesar que se salía de mi cuerpo la idea de volverte a encontrarte.
Eres tan caleidoscopio, una sucesión perfecta de accidentes y bellezas, la declaración perfecta de mi fracaso como persona.
No me preguntes qué fuimos, no creo que tenga la valentía para responderte esa maldita pregunta, y menos en este momento, en que es tan imperante eliminarte de mi memoria.
Pasan las horas, los segundos corren y realmente dudo que pueda seguir manteniendo la mentira de que no te siento.
Lo odio, te respiro en las calles y paseo tus recuerdos en las aceras.
Alejandra Garzón
31