Mis ideas filosoficas 2 | Page 78

ra los demás, la vida no tiene por qué ser solo meditación, tam- bién es correcto realizar aquello que uno ha soñado. LA VANIDAD DE LAS SECTAS Lo verdaderamente lamentable de las sectas destructivas es que hacen creer a sus adeptos que son mejores que los demás solo por el hecho de pertenecer a ellas, inflan su ego de forma que esa va- nidad se convierte en el principal obstáculo para dejarlas, porque de plantearse tal supuesto sería traumático reconocer que no solo no se es mejor que los demás, sino que además se ha sido lo bas- tante estúpido como para pensar que se es mejor solo por el hecho de servir a la secta y sin haberse molestado nunca por demostrar la veracidad de los postulados planteados por el líder, es decir que acaban siguiendo a la secta porque esta no hace otra cosa que ha- lagarles, pero con el único fin de utilizarles. Al final el adepto termina dando más importancia al hecho de creerse mejor que los demás tras haber memorizado sus postulados que a preguntarse por el sentido de estos, y no es que estos postulados no puedan ser ciertos en parte, pues lo más peligroso en estas organizaciones no son sus ideas sino el afán del líder por ser considerado como un ser incuestionable. Estas personas se caracterizan por tener un afán de poder ilimitado, pues en realidad tienen la mentalidad de un dictador o un tirano, lo grave es cuando se ponen a sí mismos el calificativo de infalibles con el fin de negar a los demás el de- recho a usar su capacidad de raciocinio. Muchas personas se preguntaran ¿pero entonces qué diferencia hay entre una religión y una secta destructiva? es cierto que mu- chas organizaciones religiosas ampliamente extendidas como el catolicismo utilizan métodos propios de las sectas destructivas, pues al igual que ellas exigen la obediencia absoluta y niegan a sus adeptos el derecho a disentir, encumbran a sus personajes re- ligiosos calificándolos como santos o divinos solo para dificultar un análisis objetivo y científico de ellos, y así tener un control ab- soluto sobre sus mentes, secuestrando su libertad de pensamiento. Por este motivo es importante separar el concepto de religión de organización religiosa, pues una religión es un conjunto de ideas 78