Mi primera publicacion VOLUMEN 20-MIGRACION-VERSION DEFINITIVA-17-MAYO-20 | Page 48

48 Manuel García y Griego mentaba sobre sus interacciones con mexicanos en el siglo anterior: “los me- xicanos nos detestaban y nosotros los odiábamos como el ser humano odia a la víbora”. 28 En 1878, el cónsul estadounidense en Matamoros observó que cuando un mexicano del lado estadounidense sufría alguna vio­len- cia, las autoridades locales no hacían caso, pero sí se preocupaban, en cam­ bio, cuando la víctima de alguna violencia fuera un sajón. 29 La tercera forma en que se manifestó la subordinación de la población de origen mexicano en los estados fronterizos fue la pérdida de sus tierras a favor de sajones recién llegados. En el condado de Nueces, las autorida- des españolas y luego mexicanas habían otorgado quince mercedes de tie­ rra de relativamente gran extensión para el establecimiento de ranchos familiares. Hacia 1848, siete de éstas habían pasado a manos de sajones; en el transcurso de los siguiente once años todas, sin excepción, pasaron a ma­ nos de dueños estadounidenses. Casi todos recibieron pagos menores al precio del mercado en zonas vecinas. Los primeros vendedores de tierras me­ xicanos lo hicieron bajo presión: Ellos no eran simplemente individuos terratenientes vendiendo bajo su pro­ pia voluntad; vendían [sus tierras] porque eran mexicanos [emphasis en ori­ ginal] quienes, en tiempo de caos, no podían seguir ocupando sus tierras y que veían venir la dominación política y militar americana. Si bien los títulos de tierras mexicanas fueron confirmadas por ley estatal en 1852, [también es cierto que] hubo debate en la convención estatal de 1845 en que algunos se manifestaron en favor de confiscar las propiedades texanas de mexicanos que ayudaron a México en su guerra con Texas. 30 Como en otras partes de Texas, el traslado de grandes propiedades de me­ xicanos se llevó a cabo pocos años después del Tratado de Guadalupe Hi­ dalgo. En Alta California sucedió algo similar. La secularización de las misiones bajo el gobierno mexicano llevó a la distribución de centenas de mercedes de tierra a las familias más destacadas de California pocos años antes de la lle­gada de estadounidenses. Al ratificarse el Tratado de Guada­ lupe Hidalgo se inició un proceso tedioso de confirmación de tierras super­ visado por tribunales federales. 31 La zona de pastoreo cerca de la villa de Santa Bárbara sirve para ilustrar este proceso. La transformación de Santa Bárbara en una zona dominada por mexicanos a otra controlada por sajo­ nes, ocurrió en el breve lapso entre 1863 y 1873. Las inundaciones y luego la sequía prolongada en el inicio de este periodo produjo una crisis que Taylor, p. 59. Taylor, p. 65. 30 Taylor, pp. 178, 182. 31 Pérez, pp. 51-104. 28 29