Mi primera publicacion planeacion participativa | Page 30

5) CAPACITACIÓN DE LOS ACTORES 148. De lo dicho anteriormente se deduce que es también fundamental capacitar tanto al personal técnico, como a los representantes electos por la población y a la propia población, dotándolos de los instrumentos que les permitan desempeñarse eficientemente en el proceso de planificación participativa descentralizada. 149. Compartimos la opinión de Rafael Enciso de que “transferir competencias sin crear las capacidades mínimas necesarias puede convertirse en algo donde el remedio resulte peor que la enfermedad.” 150. Uno de los puntos más fuertes del proceso de planificación participativa descentralizada en Kerala fue justamente el gran énfasis que se hizo en preparar a los diversos actores: comunitarios, técnicos, representantes, voluntariado. Se crearon programas de formación de varios niveles con sus respectivos manuales, campamentos de formación, concentraciones y, más tarde, seminarios donde los asistentes podían intercambiar sus experiencias. Existe un instituto de administración local donde dos veces al año los miembros electos de diferentes partes del estado acuden a esta institución para sesiones formativas de varios días. Un sólo dato nos muestra el énfasis puesto en la formación de estos cuadros: sólo en un año (2004–2005) se desarrollaron 249 programas con la asistencia de 29,000 participantes. También se ha dado mucha importancia a lo que se ha llamado "formación de formadores, es decir, a aquellas personas que van a formar a los vecinos y vecinas en sus propias comunidades 28 , y a la formación en la propia acción. 6) GENERACIÓN DE UNA BUENA BASE DE DATOS 151. Otra premisa fundamental para la planificación participativa descentralizada es la necesidad de generar una correcta base de datos que permita planificar a partir del mayor conocimiento posible de la realidad local, uno de cuyos elementos fundamentales es el mapa de actores sociales. Muchas veces a nivel central existen muchos datos, pero esos datos no están organizados y disponibles de manera que puedan ser utilizados para la planificación participativa descentralizada en la localidad y, como es lógico, esos datos nunca se refieren a los actores sociales (Ver en Anexo III una exposición detallada de los datos que estimamos deberían volcarse en esa base de datos). CAPÍTULO IV. ÁREAS TERRITORIALES, EL ESLABÓN CLAVE DE LA PLANIFICACIÓN PARTICIPATIVA MUNICIPAL 152. Aunque la situación ideal es que desde el Estado se decida la descentralización de un porcentaje importante de los recursos nacionales destinados al desarrollo del país, no cabe duda que la mayor parte de los países están muy lejos de contar con una situación de este tipo. Sin embargo, consideramos que esto no debe ser impedimento para que las autoridades locales que así lo deseen emprendan procesos de planificación participativa descentralizada en sus propios ámbitos, 28. “En el primer año de la campaña, 373 formadores a nivel estatal enseñaron a 10,497 personas a nivel zonal, las que, a su vez, impartieron talleres de un día a más de 100,000 activistas locales, quienes se convirtieron en la columna vertebral de la etapa inicial de la Campaña. En 1998 4,1950 educadores zonales recibieron formación especializada de 545 educadores del nivel nacional, a su vez, los primeros impartieron talleres a 93,000 asistentes. En 1999-2000 hubo más formación masiva, incluyendo una serie de talleres de tres días para las activistas femeninas y las representantes elegidas." (Richard W. Franke, Marta Harnecker y otros, Estado Kerala, India: una experiencia de planificación participativa descentralizada, CIM, Caracas, 2009, publicado solo en forma digital. 30