Preparando el cuarto del bebé
Desarrollo / Mes 2
118 hacerle controles, aclarar dudas de los padres y orientarlos sobre estimulación adecuada. También deben aplicársele las vacunas indicadas para su edad.
Hay que afianzarle las rutinas diarias básicas para establecer hábitos saludables y no intentar forzar comportamientos o rutinas; el aprendizaje debe ser un proceso agradable y paulatino.
Conviene fomentar su desarrollo, estimulando todos los órganos de los sentidos y los movimientos corporales, hablándole, demostrándole afecto y haciéndole ejercicios movilizando sus extremidades, ojalá al ritmo de una canción o música.
Para fortalecer los vínculos afectivos, sirve incluir a miembros de la familia en el baño, la alimentación( si se brinda con biberón) o el cambio de pañales. Es muy importante la participación activa de padre y hermanos, si los tiene.
Preparando el cuarto del bebé
La interacción con el ambiente es la clave para el desarrollo del bebé puesto que debe garantizarle un soporte en cuanto a su salud, nutrición, afecto, estimulación y protección. Estos componentes no pueden separarse ya que de su combinación depende el bienestar inmediato y futuro del niño. Dicha combinación expresa el cuidado, la atención y la posición del bebé dentro de la familia.
Es sencillo asegurar el cumplimiento de unos requisitos ambientales mínimos enfocados al cuidado del bebé. Por ejemplo, la temperatura del cuarto debe ser cómoda y sin corrientes de aire; lo ideal es que el bebé desde sus primeros días duerma solo en su cuna, que esté alejado del contacto con mascotas, que todas las visitas se laven bien las manos antes de tocarle y en lo posible que eviten darle besos; es preferible que los fumadores no visiten al bebé, aunque lo ideal es que en el primer mes las visitas sean pocas.
Desarrollo de la visión en los bebés: pág. 187
Si las condiciones lo exigen, el to del bebé puede ser compartido con los hermanos, pero a partir de los seis
cuar-
meses y teniendo en cuenta que la cuna debe estar aparte, ser individual, jamás compartida.
Los colores del cuarto se escogen a gusto de los padres; lo importante es que las superficies pintadas deben ser lavables para mantenerlas limpias, porque cuando crezca, el bebé va a explorar, jugar y untar. Así mismo, los juguetes y móviles que lo adornen deben tener volumen, no ser planos, ni desarmables en partes pequeñas.