tiene más que un sentido – escasa significación – y, por ello, resultan inadecuadas para expresar lo incognocible.” 24
Es decir, los metaconceptos están conformados por un PRINCIPIO PARADOJAL. Sin esta posibilidad polisémica indescifrable para el sujeto colectivo, no así el sujeto individuado, reintegrado, que con su voluntad dirigida, puede penetrar en lo más recóndito del signo, símbolo, entidad, hecho histórico y el hecho moral, no puede existir referente supra-legal. El problema radica pues en la estructura del pensamiento racionalista, porque“ el enorme número de mentecatos hace que la paradoja resulte peligrosa.” 25
Recalquemos, un principio supralegal no es abarcante para los sujetos psicológicos, ya que debe ser conducente a la trascendencia de los mismos. He ahí la importancia funcional para el tratado psicosocial, de contar con una meta-simbología; Es decir, la mitología es conducente a sentidos polisémicos. La mitología, por su naturaleza, conserva VALORES CARDINALES EXTRAPSICOLÓGICOS, y por eso hemos estudiado sus alcances en la primera parte de este tratado, ya que es conducente a la comprensión de un ESTADO. Los sujetos psicológicos, al estar en constante transformación, solo pueden ser POTENCIALES, NO CAUSAN ESTADO, Y LA META-ÉTICA ES UN ESTADO.
Si re-visionamos el registro histórico, veremos que el derecho consuetudinario anglosajón, se fundamentaba en la tradición metaconceptual de parámetros meta-éticos, como ancestrales códigos de HONOR Y SANGRE; Y hasta la edad moderna, el meta-concepto HONOR, fue la piedra fundamental alrededor de la cual giró todo el aparato jurídico social en el mundo antiguo. Como ejemplo tenemos el caso del Estado de Prusia de Guillermo III. Ese monolítico sentido del honor en todos los ámbitos, desde el individual hasta el colectivo social, caracterizo a muchos pueblos de la antigüedad en oriente y occidente.
Pero el lenguaje del sentido no es abarcable para los sujetos psicológicos; Piénsese en la increíble robustez volitiva que se requiere para comprender un ESTADO ABSOLUTO DE SER, se intuirá, que lo psicológico, lo mental, es simplemente insuficiente. Por eso el primer paso para propiciar una robustez volitiva semejante, radica en la intuición de lo trascendente. Algo así como un estado previo, un CONDICIONAMIENTO CONTRACULTURAL que nos permita hacer una aproximación comprensiva; Luego cada cual propiciará el encuentro cara a cara con la actualidad, momento único, donde puede manifestarse lo absoluto, Y ante esta infinitud de sentido, los sujetos psicológicos que son finitos, impotentes, inoperantes ante semejante bastedad, pueden disolverse, la personalidad psicológica puede desintegrarse. Esto significa la muerte, por lo que la robustez volitiva previa es fundamental. La existencia de élites aristocráticas, grupos herméticos e iniciáticos, círculos cerrados, cofradías, etc., prueban este extremo sobradamente.
Habría que decirles a todos los acólitos de la“ cultura democrática”, que hay ciertas cosas, que no pueden democratizarse, pues se ha evidenciado que solo
24 Carl Gustav Jüng:“ Psicología y Alquimia”. 25 Ib-idem.
- 95-