MEGACONSOLAS MEGACONSOLAS Nº 131 | Page 32

32-33_Mafia III_MEGACONSOLAS NewGeneratioin 31/10/16 21:02 Página 32 Fdo. Jotacé Análisis | | | 32 Mafia III Malas calles al rojo vivo, metralletas y escopetas con gatillo fácil, sudorosos años 60 y mucha vendetta traicionera. Estas son las claves de uno de los mejores juegos del año. 2K Games lo ha vuelto a hacer. esde que tengo uso de razón, siempre quise ser un gangster”. Aunque parezca mentira, esta declaración de intenciones no pr oviene de la Audiencia Nacional, ni siquiera de la calle Ferraz, sino de “Uno de los nuestros”, manual perfecto para el camorrista de pro y, suponemos, película de cabecera y reclinatorio de los chicos de 2K. De hecho, el comportamiento criminal y al margen de la ley se ha desparramado por buena parte de su catálogo, aunque sin duda la joya de la corona es la saga«Mafia», que ahora llega a su tercera y esplendorosa entrega gracias a Hangar 13, que se han aplicado a fondo para cuajar un juegazo que mantiene las líneas maestras del género sin caer en los tópicos más abundantes y obvios. Un trabajo de primera que satisfaría hasta a Tony Soprano, sobre todo por el acierto a la hora de localizar la acción en uno de los momentos más calientes de la reciente historia yanqui: los peligrosos años 60, en concreto 1968, con los movimientos sociales negros ya candentes, en grandes ciudades como Nueva Orleáns, que aquí se rebautiza adecuadamente como Nueva Burdeos. Será en este polvorín donde se mueva como pez en el agua (estancada) Lincoln Clay, que tras años combatiendo en Vietnam ha llegado a la conclusión de que la familia no son aquellos con los que has nacido, sino aquellos por los que estás dispuesto a morir. De vuelta a casa, Lincoln se propone escapar de un pasado criminal. Pero cuando su familia adoptiva, la mafia ne- D 2K Games | Acción, aventura Octubre | 18+ www.mafiagame.com Gráficos Jugabilidad Sonido/FX Originalidad Sin City Como diría el “flamante” Nobel de Literatura, en 1968 los tiempos ya habían cambiado, incluso en ciudades “pequeñas” como Nueva Burdeos, transformado en un ce- nagal sórdido, corrupto y más tenso que el cutis de una tertuliana de sobremesa. Un panorama perfectamente recreado en el juego, desde el “downtown” podrido de dinero y sobornos hasta la pija y no menos apestosa barriada de Frisco Fields, pasando por French Ward, barrio chino (o peor) ideal para el descanso del guerrero, con Bada-bings incluidos. Vaya tela...