Marejadas Rurales y Luchas por la vida CONSTRUCCIÓN SOCIOCULTURAL y ECONÓMICA del CAMPO | Page 126
LAURA ELENA SÁNCHEZ CASTILLO
Cambio de la cultura del telar de cintura en Tlaquilpa, Veracruz
3. Factores de cambio
En primer lugar, podemos ver que la llegada de las instituciones públicas a
la comunidad y la capacitación para recuperar el interés de la artesanía fue
el primer acercamiento a los límites identitarios entre lo rural y lo urbano.
Durante la permanencia de Larios en la comunidad y su esfuerzo por dar
a conocer la labor artesanal continuo la capacitación de las mujeres, esta vez
mezclando otras formas de tejido que son más conocidas en la ciudad como
es el tejido en gancho o agujas.
Recuerdan las artesanas que hubo una muchacha que hace 20 años llegó
a enseñar a las mujeres diferentes técnicas de tejido, pero solo las aprendieron
las jóvenes, como se puede leer a continuación:
Pues ellas aprendieron con las amigas, no sé cómo aprendieron, con sus
amigas o con, antes venían, no sé de donde, una señora que enseñaba hacer
cosas de gancho, de aguja, como los mandaron del gobierno, no sé quién, si
venían, ahora ya no vienen, antes venían seguido (María el 14 de agosto de
2016).
En este testimonio se puede apreciar que la mujer joven entró a un ciclo
donde su cultura nahua cambió para formarse como artesana y con ello una
apropiación de técnicas urbanas para su uso en un ambiente rural, como lo es
el hilado de la lana; las mayores pasaron por el mismo proceso de diferente
forma, ellas aprendieron por medio de las hijas y a base de prueba y error.
Además de la llegada de los funcionarios públicos, se encuentran la
migración y la escuela como formas de integración a la idea de que la vida
rural es atrasada y primitiva, y que la mejor opción para sobrevivir es mudarse
a trabajar en las ciudades debido a que son sinónimo de modernidad, aunque
todavía prevalezca el sentimiento de identidad étnica, la mujer trata de ocultarlo
para no ser segregada de las demás que no aprecian su trabajo.
Actualmente vemos que estos cambios en las formas de interpretación de
la identidad étnica se han ido modificando debido a que hay una unión entre
lo rural y lo urbano, en este caso entre el proceso productivo de una prenda
tejida de lana y los nuevos instrumentos para tejer urbanos, han hecho que la
cultura tlaquilpeña tenga aspectos rurales, a los que García llama hibridación.
La llegada de las nuevas técnicas de tejido en Tlaquilpa no sólo ha afectado
la percepción que se tiene del telar, sino también la concepción de las mujeres.
Anteriormente eran consideradas como tal dependiendo de la destreza al
momento de tejer, actualmente las jóvenes “dignas de casarse”, son valoradas
por el trabajo en casa, dejando de lado la labor artesanal.
101