Maravilloso desastre Maravilloso Desastre | Page 96

Capítulo 6 Momento decisivo La cita del lunes por la noche cubrió todas m is expectativas. Com im os com ida china y m e reí al ver la habilidad de Parker m anej ando los palillos. Cuando m e llevó a casa, Travis abrió la puerta antes de que Parker pudiera besarm e. Cuando salim os el m iércoles siguiente por la noche, Parker se aseguró de poder besarm e y lo hizo en elcoche. El j ueves a la hora de com er, Parker se encontró conm igo en la cafetería y sorprendió a todo el m undo sentándose en el sitio de Travis. Cuando Travis acabó su cigarrillo y volvió a entrar, pasó por delante de Parker con indiferencia y se sentó al final de la m esa. Megan se aproxim ó a él, pero se quedó desencantada en el acto cuando él le dij o con la m ano que se apartase de él. Todo el m undo se quedó callado después de eso, y a m í m e resultó difícil atender a cualquiera de las cosas de las que Parkerhablaba. —Ya m e doy cuenta de que no estaba invitado —dij o Parker, in- tentando llam ar laatención. —¿Qué? —Me he enterado de que tu fiesta de cum pleaños es el dom ingo. ¿No estoy invitado? Am erica m iró a Travis, que, a su vez, m iró a Parker con ira, a punto de tirarlo al suelo com o si fuera césped recién cortado. —Era una fiesta sorpresa, Parker —puntualizó Am erica con suavidad. —¡Oh! —dij o Parker, avergonzado. —¿Me vais a hacer una fiesta sorpresa? —pregunté a Am erica. Ella se encogió de hom bros. —Fue idea de Trav. Es en casa de Brazil el dom ingo. A las seis. A Parker se le enroj ecieron las m ej illas. —Supongo que ahora sí que no estoy invitado. —¡Claro! ¡Por supuesto que lo estás! —dij e, agarrándole la m ano que tenía encim a de la m esa. Doce pares de oj os se centraron en nuestras m anos. Podía ver que Parker se sentía tan incóm odo con tanta